Copacabana, Antioquia, 19 de diciembre de 2021.- El municipio de Copacabana, ubicado en el norte de la subregión del Valle de Aburrá, en el departamento de Antioquia, vive por estos días un aumento en el número de asesinatos, algunos de estos de personas torturadas o desmembradas, además de la inseguridad, la criminalidad es permanente.
Mientras esto ocurre y la estrategia de la seguridad no parece funcionar adecuadamente, el municipio se ve golpeado por un nuevo escándalo que involucra a la Policía, institución que no ha podido -a pesar de cambiar de uniforme- transformar la violenta y criminal forma de actuar de muchos de sus miembros, las masacres policiales son un ejemplo de eso.
Abuso policial en Copacabana
La protagonista de este acto bochornoso es una oficial de alta graduación de la Policía Nacional, la mayor Sonia Cuesta. Ella trabaja nada menos que en la Dirección de la Policía Nacional en la ciudad de Bogotá.
La oficial en aparente estado de embriaguez, agredió verbal e incluso físicamente a una patrullera.
En el video se ve cómo se dedica a recordarle que ella fue su comandante; pero no lo hace fraternalmente, sino con palabras soeces que acompañan el recordatorio. “Yo fui su comandante, a mí me respeta gonorrea”.
EL ARTÍCULO CONTINÚA ABAJO
Frente a este caso, la Policía Nacional ha dicho en comunicado público este 18 de diciembre que los hechos se registraron en el municipio de Copacabana y que la oficial se encontraba de descanso.
“Una vez conocidos los hechos, la funcionaria fue separada inmediatamente del cargo. Igualmente, se procedió a dar apertura a la respectiva investigación disciplinaria, garantizando el debido proceso. La Inspección General rechaza estos comportamientos que no son acordes a los lineamientos institucionales”, se observa en el escrito.
Brutalidad Policial en Santa Rosa de Osos
Pero no ha sido el único caso reciente donde se involucra un oficial de esta institución. Esta vez no fue abuso policial, no. Se trató de brutalidad policial, ejercida contra una persona detenida por parte de un capitán.
El hecho violento ocurrió en Santa Rosa de Osos, Norte del departamento de Antioquia. Todo quedó registrado en un video que circula en las redes sociales.
El capitán, que “no tiene nombre”, pues la Policía no lo ha querido dar a conocer, actuó con sevicia contra un ciudadano inerme. El caso se conoció el 13 de diciembre.
En el video se aprecia como este oficial cogió a puños y patadas a un ciudadano joven que está adentro de la estación de Policía del municipio.
Lo más absurdo y que causa indignación -además de la golpiza- es la actitud de indiferencia y complicidad de varios miembros de la Policía, nadie dijo nada, nadie intervino, ¿omisión o complicidad? Ambas.
A este caso también respondió en la red social Twitter la Policía Nacional, anunciando que el oficial ha sido separado del cargo.
“Rechazamos de manera contundente los hechos de abuso de autoridad, que empañan, de alguna manera, la labor de la institución”, se afirma con vehemencia, pero sin contundencia, por parte del comandante (e) de la Regional 6 de la Policía, brigadier general Javier Josué Martín Gámez.
Apunte Urbano
Masacre policial en Soacha y Bogotá
La Policía de Bogotá (MEBOG) es responsable de 11 de las 14 muertes de civiles ocurridas durante las protestas de septiembre de 2020 en Bogotá y el vecino municipio de Soacha, según confirma un informe publicado el día 13 de diciembre, coincidencialmente el mismo día en que ocurrió el acto de brutalidad policial de Santa Rosa de Osos.
Si la Policia en Colombia no protege, pero si masacra, ¿en manos de quiénes está nuestra seguridad?
