Asunción, 3 marzo.- Integrantes del gremio de enfermeros de Paraguay se manifestaron este miércoles frente al Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente (Ineram) en protesta ante la falta de medicamentos y material sanitario, en especial para los internados por el coronavirus, y cuando la población sigue sin ser vacunada.
A la par de la manifestación en Asunción, la Asociación Paraguaya de Enfermería denunció en un comunicado que la «ciudadanía no puede seguir sufriendo la falta de estos insumos vitales para los pacientes» y acudiendo a los fondos destinados por el Gobierno para la pandemia.
Y es que en marzo de 2020, el Gobierno consiguió la aprobación de un crédito de 1.600 millones de dólares para hacer frente al coronavirus.
Tanto en el comunicado de la asociación como en la protesta se pidió la inmunización de todos los trabajadores de salud y de la ciudadanía, y se instó a la población a evitar las aglomeraciones al estar en el «punto más crítico» de la pandemia.
Las movilizaciones del personal sanitario del centro se produjeron un día después de que el director del Ineram, Felipe González, presentara su renuncia verbal al cargo ante la falta de insumos, aunque se le mantendrá en el cargo.
Mientras el personal de blanco se manifestaba en el Ineram, el ministro de Salud, Julio Mazzoleni, participaba en varios actos en el Palacio de Gobierno, junto al presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, sin que ninguno de los dos se pronunciara al respecto de la crisis de medicamentos.
La protesta del personal sanitario se produjo un día después de que el presidente dijera en un discurso que, en caso de contagiarse de coronavirus, acudiría a internarse en el Ineram.
Para el sector de los trabajadores de blanco, esas palabras muestran el alejamiento del mandatario con la realidad del país y de los centros de salud en un situación como la actual, en la que los casos de coronavirus siguen en aumento sostenido.
A eso se suma el malestar por la lenta llegada de las vacunas, que hasta la fecha se limita a una remesa de 4.000 dosis de la Sputnik V reservada para el personal sanitario de la «primera fila» en el combate a la covid.
Paraguay sigue aguardando un millón de dosis, procedentes de Rusia, y de las 4,3 millones acordadas a través del mecanismo Covax de la Organización Mundial de la Salud (OMS), cuyo primer envío se espera para mediados de este mes.
El país guaraní acumula desde marzo de 2020 161.530 contagios de coronavirus, 3.218 fallecidos y 135.373 recuperados.