San Salvador, 12 mayo.- El enviado especial de EE.UU. para el Triángulo Norte de Centroamérica, Ricardo Zúñiga, regresa este miércoles al país norteamericano e informará a «diferentes actores», entre estos a la Casa Blanca, sobre la situación de El Salvador tras la y del fiscal general.
Zúñiga llegó el lunes a El Salvador y sostuvo diversas reuniones para «entender y esclarecer lo sucedido el 1 de mayo», día en que la nueva Asamblea Legislativa, de amplía mayoría oficialista, decidió, en una primera acción, destituir a los cinco jueces de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema y al fiscal general Raúl Melara.
«Sostuve conversaciones muy cordiales con todos los sectores para entender los puntos de vista acerca de los acontecimientos del primero de mayo vinculados a la destitución de los cinco magistrados y del fiscal», dijo Zúñiga en una breve declaración a la prensa luego de una entrevista televisiva en un medio local.
El diplomático señaló que «después de tener conversaciones claras y entender el contexto mejor, voy a volver a los Estados Unidos y platicar con diferentes actores, con el Congreso, con la Casa Blanca y con el Departamento de Estado para poder determinar los próximos pasos».
«DESTITUCIONES NO CABÍAN DENTRO DEL MARCO DE LA LEY»
Estados Unidos es el país que más ha criticado las destituciones y su misión diplomática en El Salvador no atendió el llamado a una reunión con el presidente Nayib Bukele con embajadores para justificar las destituciones y en la que dijo a los representantes que «están mal informando a sus países».
Zúñiga subrayó que «las acciones del primero de mayo no contribuyen a ese esfuerzo (de crecimiento y prosperidad), porque no están en cumplimiento de la Constitución o del procedimiento legal».
«Entendemos que lo que pasa en El Salvador afecta directamente a Estados Unidos y para nosotros lo importante es crear esas condiciones de confianza en la jurisprudencia de El Salvador», apuntó.
El enviado especial de la Administración de Joe Biden enfatizó que «esas destituciones no cabían dentro del marco de la ley y en la Constitución» y agregó que «estamos viendo cómo podemos avanzar, tenemos una agenda importante con El Salvador y nos gustaría esclarecer esto y poder avanzar en esa agenda positiva definida por la vicepresidente (Kamala Harris)».
REUNIÓN «CORDIAL Y ABIERTA» CON PRESIDENTE BUKELE
Zúñiga confirmó que el martes sostuvo una reunión con el presidente Bukele, aunque no especificó los temas que fueron abordados en la misma.
«Tuvimos una reunión cordial y abierta con el presidente de la República», dijo a la prensa.
Esta es la segunda visita que el enviado especial de Biden realiza a El Salvador en un mes. En la primera ocasión, Zúñiga no llegó a reunirse con el presidente salvadoreño.
«Sí, en este viaje pedimos una cita con el presidente, como (con) otros actores, y no fue concretada», dijo en ese momento en una reunión privada con periodistas locales.
Subrayó que, hasta donde él conoció, «no fue una visita cancelada, simplemente nunca confirmamos esa reunión».
La segunda visita del diplomático se da en momentos en que el país centroamericano está bajo la mirada de la comunidad internacional por las destituciones de los jueces constitucionales y del fiscal general.
La comunidad internacional se ha mostrado preocupada y ha criticado la destitución de los magistrados constitucionales y del fiscal general el 1 de mayo pasado.
Diferentes organismos, como la Unión Europea y las Naciones Unidas, han señalado que estas destituciones sin el debido proceso atentan contra la separación de poderes y la independencia judicial.
El Salvador se ha adentrado en una crisis política desde que el oficialismo tomara a principios de mes las riendas del Parlamento para un nuevo periodo y, como primera acción, votara la destitución de los magistrados con los que Bukele tuvo enfrentamientos durante el último año, lo que ha sido criticado como un golpe al sistema de separación de poderes.
Tras conocerse la destitución, la Sala de lo Constitucional emitió un fallo declarando inconstitucional la votación en su contra, acción que diversos abogados consideran que anula la votación.