Seúl, 6 de marzo de 2025.- La Fuerza Aérea de Corea del Sur ha confirmado que el bombardeo accidental este jueves de una ciudad al norte del país, que causó 15 heridos durante un ejercicio de fuego real, se debió al error de un piloto al ingresar las coordenadas del lanzamiento de los proyectiles.
En el entrenamiento participaban dos cazas KF-16, cada uno de los cuales lanzó cuatro bombas MK-82 que cayeron fuera del área designada, dejando el citado número de heridos identificados hasta el momento, entre ellos dos graves, y daños en varias viviendas.
El accidente tuvo lugar hoy a las 10:05 hora local (1:05 GMT), durante un ejercicio de fuego real en el campo de entrenamiento de Seungjin, en Pocheon, a 50 kilómetros al norte de Seúl, según confirmó el Ejército surcoreano a EFE.
El portavoz de la Fuerza Aérea dijo en una rueda de prensa que, con base en el testimonio del piloto, se confirmó el fallo en la introducción de coordenadas de ataque durante la preparación del vuelo.
Por su parte, el Ministerio de Defensa indicó que la causa exacta del incidente sigue en investigación, aunque confirmó que el primer caza cometió un error al ingresar las coordenadas. Respecto al segundo avión, las autoridades señalaron que aún están evaluando si su lanzamiento fallido estuvo vinculado al fallo del primero.
Unas diez personas han sido hospitalizadas, entre las que se encuentran dos hombres con heridas graves, pero que, según los bomberos, no atentan contra su vida. Entre los heridos hay dos soldados y dos extranjeros.
«Lamentamos profundamente el daño causado a la población civil y expresamos nuestro deseo de una pronta recuperación de los heridos. Implementaremos todas las medidas necesarias para compensar a los afectados», señaló en un comunicado el Ejército.
El accidente ocurrió fuera del área de entrenamiento, en el marco de los ejercicios militares conjuntos entre Corea del Sur y Estados Unidos, que se llevan a cabo en la región como parte de los preparativos para el ejercicio anual Freedom Shield que arrancará el próximo lunes, y en una zona ubicada a unos 25 kilómetros de la frontera con Corea del Norte.
La Fuerza Aérea ha puesto en marcha un comité de respuesta encabezado por el subjefe del Estado Mayor Conjunto, el teniente general Park Ki-wan, para investigar las causas y evaluar los daños.
Las bombas involucradas, identificadas como MK-82, son dispositivos de gran poder destructivo utilizados para atacar infraestructuras como puentes y edificios. Según datos militares recogidos por la agencia local de noticias Yonhap, una sola bomba puede generar un cráter de hasta 8 metros de diámetro y tiene un radio de impacto similar al de un campo de fútbol.
EFE