Madrid, 13 agosto de 2021.- España ha comenzado a devolver a Marruecos a parte de los 800 menores de edad que entraron en la ciudad norteafricana de Ceuta los días 17 y 18 de mayo pasado, cuando unas 10.000 personas cruzaron a esa ciudad española, en el norte de África, desde el país vecino.
Fuentes de la Delegación del Gobierno español en Ceuta confirmaron este viernes a EFE que la operación se inició hoy en el centro polideportivo Santa Amelia, donde están alojados 234 de los que aún permanecen en la ciudad.
Sin embargo, el Ministerio del Interior no confirmó que se hayan iniciado los traslados ni que exista un acuerdo con Marruecos para hacerlo.
Las salidas se llevan a cabo en grupos de 15, excepto los considerados «vulnerables», según las fuentes, sin que se haya concretado qué características concurren en esos casos.
Otras fuentes consultadas por EFE explicaron que ya se han producido 15 entregas de menores.
Esos dos días de mayo, unos 10.000 marroquíes sortearon el espigón fronterizo entre Marruecos y España para entrar en Ceuta, aunque la gran mayoría ya fueron devueltos.
Esa situación agravó la crisis diplomática entre Madrid y Rabat originada por la hospitalización aquellos días en España de Brahim Gali, líder del Frente Polisario, que reclama la independencia del Sáhara Occidental, ocupado en parte por Marruecos.
«RETORNO CONCERTADO»
Según informó hoy la cadena radiofónica española SER, «por indicación del ministro del Interior» español se ha pedido «efectuar el retorno de los menores al Reino de Marruecos», de acuerdo con una comunicación dirigida a la Delegación del Gobierno en Ceuta y a las autoridades locales ceutíes el pasado día 10.
Señala también que Marruecos «se compromete a velar por los intereses de los menores».
Un escrito de la Secretaría de Estado de Seguridad de España, al que tuvo acceso EFE, indica textualmente: «Rogamos se proceda a ejecutar las previsiones recogidas en el artículo 5 del Acuerdo entre el Reino de España y Marruecos de 2007 sobre la cooperación en el ámbito de la emigración ilegal de menores no acompañados, su protección y su retorno concertado».
Se indica, igualmente, que «el fin último es el de garantizar en cada caso las condiciones de reunificación familiar efectiva del menor o su entrega a cargo de una institución de tutela».
La organización de defensa de la infancia Save the Children insistió en que cualquier repatriación colectiva de niños u adolescentes es ilegal y recordó que las reagrupaciones de menores marroquíes han de garantizar su protección y ser individuales y voluntarias.