Madrid, 5 de agosto de 2025.- España continúa este martes sumida en una persistente ola de calor extremo que mantiene a gran parte de la península en alerta, con temperaturas superiores a los 40 grados, excepto en el norte del país.
Desde el pasado domingo, cuando se inició este segundo episodio térmico en lo que va de verano, gran parte de la península hace frente a máximas que, en algunos casos, rozaron los 43 grados.
En un comunicado difundido hoy, la Agencia Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) explicó que la «configuración sinóptica», que continúa bastante estacionaria, favorece la «persistencia de una masa de aire cálida y seca de origen africano sobre gran parte de la Península».
El organismo agregó que «este hecho, unido a la elevada insolación propia del verano, está haciendo que se registren valores térmicos más altos que los habituales para esta época del año, conformando un episodio de ola de calor».
De esta manera, se espera que a lo largo de la jornada se den ligeros ascensos en las máximas de la mitad sur y del tercio este del país, donde los termómetros rebasarán de nuevo los 40-42 grados.
Ante este panorama anormalmente caluroso, el norte peninsular se verá afectado por un flujo fresco de componente norte, que ocasionará descensos localmente notables en este sector, según los datos difundidos.
Noventa olas de calor en lo que va de siglo
Con la llegada de esta segunda fase calurosa del verano de 2025, España ha vivido ya 90 olas de calor en lo que va del siglo XXI, según datos del citado organismo, que resalta que este fenómeno es cada vez más largo con un registró histórico de 26 días continuos en 2015.
El «número de días en ola de calor muestra un aumento claro y estadísticamente significativo» en la península y los archipiélagos españoles de Baleares y Canarias, considerando que entre 2000 y 2024 hubo 474 jornadas de calor extremo a diferencia de las 212 registradas entre 1975 y 1999, por lo que se establece un incremento de más del 50 %.
El portavoz de la Aemet, José Ángel Núñez, explicó a EFE que si bien es más «adecuado» contabilizar el número de días en las olas de calor, la frecuencia de estas también ha aumentado «significativamente», tomando en cuenta que entre 1975 y 1999 hubo 44 olas, mientras que ya suman 90 en lo que va de este siglo, más del doble.
Estos fenómenos meteorológicos son, según esto, cada vez más extensos, por lo que más regiones se vean afectadas cada año, lo que hace que se mantengan los valores de la temperatura media de las máximas, «aunque esto no quiere decir que las olas de calor no sean más intensas».
EFE