A principios de septiembre el gremio de comerciantes por primera vez reconoció una problemática conocida por casi todos los medellinenses. “El 90% de los comerciantes del valle de Aburrá tienen que pagar extorsiones que van desde los 50.000 hasta los 200.000 pesos semanales”, dijo el director de Fenalco Antioquia, Sergio Ignacio Soto. (Continuar leyendo aquí).
Análisis Urbano y la ONG Corpades se permite recordar al doctor Sergio Ignacio Soto, director de Fenalco Antioquia, a la institucionalidad en cabeza del Brigadier General José Ángel Mendoza Guzmán, comandante de la Meval (Policía Metropolitana del Valle de Aburrá) y al Alcalde de Medellín, Aníbal Gaviria Correa que el tema de la Vacuna (extorsión) es un flagelo que afecta al conjunto de la ciudad de Medellín y al resto del Valle de Aburrá.
¿Denuncias sobre la vacuna (extorsión) bajaron dice la Alcaldía de Medellín?
La institucionalidad en cabeza de la Alcaldía de Medellín debería revisar con mayor rigurosidad y profundidad las razones que han llevado a la disminución de la denuncia ciudadana ante los organismos de seguridad y de investigación judicial del Estado, podría deberse a la desconfianza en la institucionalidad debido a la falta de compromiso de los funcionarios y servidores públicos, igualmente la connivencia, la nómina paralela que están ligadas a la corrupción ha llevado a que exista el temor a realizar la denuncia formal por miedo a que los criminales puedan conocer los pormenores de estas denuncias.
El control territorial de más del 70% por parte de 350 bandas paramilitarizadas que le sirven a los Urabeños y la Oficina del Valle de Aburrá hacen que la gente prefiera no meterse en problemas, ya que perciben que ese mal representado en la criminalidad urbana perdurará por mucho tiempo por contar con la protección oficial de un sector de la institucionalidad.
¿Será que la vacuna se incrusto en la cotidianidad de la vida ciudadana y por eso se ve cómo algo normal pagarla? Pareciera que si.
