El reguetonero puertorriqueño Farruko, que en junio fue condenado a tres años de libertad condicional por no declarar 51.802 dólares a su llegada al aeropuerto de San Juan, dice que no se arrepiente de nada de lo que hizo porque «son cosas que el destino las quiso así».
«No me arrepiento de nada, uno tiene que afrontar las cosas y recibirlas como sea, con algún tipo de enseñanza o bendición”, confesó el artista durante una entrevista con Efe en Miami.
Carlos Efrén Reyes Rosado, conocido artísticamente como Farruko, aseguró que aceptó esa sentencia como un «aprendizaje de vida» y se dio cuenta de que «que no todo lo que te rodea y lo que brilla es oro».
«Lo más complicado ha sido la incertidumbre de saber qué va a pasar con uno, el saber si vas a estar lejos de tu familia, de tus hijos», agregó al admitir que en algún momento temió por «desaparecer» de la industria musical.
Ahora el artista, lejos de sus disputas legales, encara su carrera profesional «mejor que nunca». Su más reciente disco, «Gangalee», ha logrado cosechar grandes éxitos en Estados Unidos, América Latina y muchos otros rincones del mundo.
«En 2019 hubo muchos altibajos, pero me dejó ‘Gangalee’, que ha sido el disco más exitoso de toda mi carrera, ahora cierro un ciclo para abrir otro de más música y nuevos proyectos”, recalcó.
En 2020 arrancará una amplia gira que lo llevará a actuar en muchas ciudades. El próximo 25 de enero se presentará en el American Airlines Arena del sur de la Florida e interpretará algunos de sus éxitos, como «Delincuente» o «Mi forma de ser».
El artista, que acaba de recibir seis nominaciones para el Premio Lo Nuestro, dijo que su álbum se convirtió en un «refugio» y un «desahogo» que le sirvió como válvula de escape para evadirse de sus problemas con la justicia de Estados Unidos, ya que se enfrentaba a varios años de prisión por contrabando.
«Fue mi manera de gritar al mundo: ‘Este soy yo, así soy yo y así veo el mundo’, porque a veces uno no encuentra la plataforma correcta para poder expresarse», comentó.
Critica que «hoy en día mucha gente vive del qué dirán en las redes sociales, de aparentar», algo que, a veces, es «bien difícil despegarse». No esconde que, en algún momento, él ha estado en esa misma situación, pero ha descubierto que es mejor «vivir a tu manera sin tener que exponerla públicamente».
«A veces la solución está en desconectarse de ciertas cosas», apostilló.
Hace un tiempo que Farruko decidió abrir su corazón y explicar a sus seguidores que había sufrido varios episodios de ansiedad debido al estrés por el trabajo.
«Soy una persona que cojo mucho estrés por mi trabajo, soy el líder en mi familia y tengo que estar pendiente de todo el mundo», comentaba.
Contó que su abuelo, Efraín Reyes, sufría la misma enfermedad que él, pero, al no poder lidiar con ella, tuvo fatal desenlace.
«Mi abuelo se quitó la vida, aún no entiendo por qué tomó esa decisión, y yo creo que lo dejó como ejemplo para que nadie de su familia cometiera el mismo error que cometió él», recordó sobre la figura de «Pichirri», que así era como lo llamaba cariñosamente.
Después de todo, sabe que ahora ha de «coger distancia en algunas cosas» para que eso no le acabe afectando a su vida personal.
«No huirles (a los problemas), pero tratarlos desde lejos para que no me afecten tanto a mí, ahora me cojo mi tiempo para mí, para ir a la playa, para refrescarme, ya no puedo estar todo el tiempo con el trabajo porque no puedo lidiar con eso”, comentaba.
Por eso, aprovechó para mandar un mensaje a todos los que, como él, están sufriendo esa misma condición médica.
«Todo tiene solución, no nos podemos encerrar en los problemas, uno tiene que buscar la manera de controlar eso», finalizó.
EFE.