La compañía estadounidense L Brands anunció este jueves que ha llegado a un acuerdo con la firma privada Sycamore para vender el 55 % del capital de su conocida firma de ropa interior Victoria’s Secret por 525 millones de dólares y separarla de su matriz, que tiene dificultades financieras.
La rumoreada operación fue confirmada este jueves por L Brands en un comunicado, donde señala que el consejero delegado y presidente de la junta directiva de este conglomerado, el magnate Les Wexner, de 82 años, se retirará de sus dos cargos y pasará a ser presidente emérito.
“Victoria’s Secret, con un valor corporativo de 1.100 millones de dólares, se separará de L Brands y será una empresa privada con su mayoría en propiedad de Sycamore”, dice la nota, en la que se desgrana que Sycamore comprará el 55 % del accionariado por 525 millones y L Brands mantendrá un 45 %.
El conglomerado L Brands, que últimamente ha tenido buenos resultados con su firma Bath & Bodyworks pero no con Victoria’s Secret, pretende utilizar los ingresos de la operación, junto a un “exceso” de 500 millones en su balance, para “reducir deuda”, de acuerdo a la información.
Wexner describió como un triunfo corporativo la conversión en una firma de propiedad privada de Victoria’s Secret, que ha pasado de reunir a millones de espectadores en su desfile anual televisado con sus famosas modelos “ángeles” a ser investigada por su cultura “misógina y de intimidación” por The New York Times.
Victoria’s Secret, que abarca las marcas Victoria’s Secret Beauty y PINK, podrá “volver a sus niveles históricos de rentabilidad y crecimiento” a largo plazo gracias al acuerdo con Sycamore, que tiene una “gran experiencia en el sector minorista y un historial de éxitos”, escribió el magnate en la nota.
Wexner, que lleva medio siglo al frente de L Brands, se ha visto salpicado por la polémica en los últimos meses por su relación de negocios con el financiero acusado de abusos sexuales a menores Jeffrey Epstein, quien se suicidó el verano pasado en su celda de Nueva York mientras esperaba un juicio.
EFE.