Londres, 26 enero- El Gobierno británico dará «prioridad» a la reapertura de los colegios cuando empiece a relajar las medidas de confinamiento para contener la pandemia ante las crecientes presiones para que esos centros vuelvan a operar, aunque todavía no fija una fecha para ello.
Así lo indicó hoy en el Parlamento el secretario de Estado de Educación, Nick Gibb -que ocupó el lugar del ministro, Gavin Williamson-, que aseguró que el Ejecutivo avisará a las familias con «dos semanas de antelación» antes de la esperada reapertura.
Por el momento, los colegios seguirán con las puertas cerradas y enseñando virtualmente -excepto en el caso de los hijos de trabajadores considerados «esenciales» o de menores en situación vulnerable- hasta, al menos, después de las próximas vacaciones escolares de febrero (la semana del 15 al 19).
En su comparecencia en los Comunes, Gibb indicó que «el Gobierno tiene el fuerte deseo de reabrir todos los colegios y universidades lo antes posible».
«Daremos prioridad a la reapertura de las escuelas cuando comencemos el proceso de levantar las restricciones del confinamiento», apuntó.
También dijo que desde el Ejecutivo son «muy conscientes del daño ocasionado a la educación y desarrollo de los niños, particularmente los alumnos más desfavorecidos al estar lejos del colegio» así como de «los crecientes obstáculos que afrontan los padres» con la educación remota.
Gibb respondió además a la portavoz de Educación de la oposición laborista, Kate Green, que insistió en que revelara detalles sobre los futuros planes de reapertura de esos centros y de las universidades.
La decisión acerca de cómo y cuándo reabrir dependerá, explicó el secretario de Estado, de que se cumplan una serie de objetivos «en base a datos claros sobre sanidad pública», guiados por evidencias y asesoramiento científico, como tasas de hospitalización, índices de mortalidad, tasa de vacunación y «el desafío que plantean las nuevas variantes».