El Gobierno colombiano exigió este martes a la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) un cese el fuego permanente, así como la liberación de todos los niños reclutados y los secuestrados que tiene en su poder.
Así lo expresó el alto comisionado de Paz, Miguel Ceballos, al rechazar el anuncio del ELN de no prorrogar el alto el fuego unilateral que declaró durante todo el mes de abril por la contingencia del coronavirus en el país.
«El Gobierno exige al ELN un cese al fuego permanente y la entrega inmediata de todos los secuestrados, de todos los menores que han sido reclutados a la fuerza y el cese inmediato a la instalación de minas antipersona», dijo el funcionario en una declaración divulgada por su despacho.
Ceballos consideró que con el anuncio de reactivación de acciones criminales, la guerrilla «no hace sino alejarse de la realidad de este país» y que los jefes de ese grupo, de los que dijo unos están en Cuba y otros en Venezuela, parece que no están «sintonizados con las necesidades del pueblo colombiano».
El funcionario también recalcó que tanto el ELN como las disidencias de las FARC, Los Caparros, el Clan del Golfo y Los Pelusos «tienen la obligación de respetar la vida y la movilidad» de campesinos, indígenas y afrodescendientes.
Sobre el anuncio el ELN, secretario general de la ONU, António Guterres, lamentó hoy la decisión de la guerrilla colombiana de no prolongar el alto el fuego unilateral que declaró hasta el 30 de abril y pidió a todos los grupos armados que cesen la violencia para facilitar la lucha contra el coronavirus.
Las negociaciones del anterior Gobierno colombiano con el ELN quedaron en suspenso con la llegada de Iván Duque al poder, quien al asumir la Presidencia, el 7 de agosto de 2018, condicionó la continuidad de las negociaciones a que esa guerrilla deje en libertad a todas las personas que tiene secuestradas y renuncie a esa y otras actividades delictivas.
Ese proceso quedó en punto muerto luego del atentado con coche bomba cometido por el ELN el 17 de enero de 2019 contra una Escuela de la Policía en Bogotá que dejó 22 cadetes muertos, entre ellos una ecuatoriana, y 66 heridos.
EFE