Atenas, 9 de abril de 2025.- Grecia está este miércoles paralizada debido a una huelga general de 24 horas, la tercera en algo más de tres meses, y manifestaciones convocadas tanto para el sector público como el privado con el objetivo de exigir aumentos salariales y medidas contra la carestía general.
Al paro, convocado por los principales sindicatos del sector público y privado, ADEDY y GSEE, se han sumado los controladores aéreos y los marineros, por lo que no hay vuelos comerciales y los barcos están amarrados en los puertos de todo el país.
Esto afecta también a decenas de miles de turistas, en un momento en el que el número de visitantes extranjeros en Grecia ha aumentado considerablemente en comparación con la temporada invernal.
Atenas amaneció con un transporte público muy mermado, sin metro ni tranvías, que sólo funcionarán algunas horas durante el mediodía para facilitar el desplazamiento de las personas que asistan a las manifestaciones en el centro de la capital.
Además, la Policía ha cortado el tráfico en las principales vías céntricas de la ciudad, ya que se espera que miles de personas acudan a las protestas, informa el diario griego Efsyn en su versión digital.
«Trabajo con derechos para vivir con dignidad», rezan algunas pancartas que enarbolan los primeros manifestantes llegados a la plaza Klafthmonos, desde donde tienen previsto marchar hacia el Parlamento griego.
También se esperan movilizaciones en otras urbes del país heleno.
Los sindicatos exigen al Gobierno del primer ministro, el conservador Kyriakos Mitsotakis, aumentos salariales para poder vivir «dignamente» y la firma de convenios colectivos en todos los sectores para que los trabajadores puedan protegerse de abusos por parte de los empleadores.
También reivindican la adopción de medidas «concretas» para atajar la carestía generalizada y la crisis de la vivienda.
Pese a que el primer ministro griego argumenta reiteradamente Grecia es actualmente «un ejemplo a seguir en Europa» respecto a su política económica, el país sigue siendo uno de los más pobres de la Unión Europea (UE).
Según los datos publicados el pasado mes por Eurostat, el poder adquisitivo de los griegos fue en 2024 el segundo más bajo de la UE al situarse por delante solo de Bulgaria.
EFE