La joven activista sueca Greta Thunberg, impulsora del movimiento «FridaysForFuture» (Viernes por el Futuro), reclamó hoy más atención para África en la lucha contra la crisis climática.
Acompañada por varias activistas africanas, que intervinieron por videoconferencia desde sus respectivos países, Thunberg, de 17 años, pidió que se hable más de los efectos negativos del cambio climático sobre el continente africano y admitió hartazgo por que la atención se concentre tanto en ella.
«Le quita a otras personas la posibilidad de hablar. Cuando todo se centra en mí, el foco se traslada de la propia crisis climática, de la ciencia y de las personas que deben ser escuchadas», señaló en rueda de prensa en Estocolmo.
Thunberg estuvo secundada por varias compañeras del movimiento como la keniana Makenna Muigai y la ugandesa Vanessa Nakate, protagonista de una polémica la semana pasada en el Foro Económico Mundial de Davos (Suiza), al ser excluida de una foto conjunta de otras activistas posando con la joven sueca.
«África en conjunto se está viendo afectada por los efectos negativos del cambio climático. Un claro ejemplo es la plaga de langostas en el este que pronto llevará a una situación de inseguridad alimentaria. Lo triste es que muchos occidentales no saben por qué esto está ocurriendo», afirmó Muigai desde Nairobi.
Thunberg, que esta semana reveló que ha registrado su nombre y el de su movimiento para evitar posibles fraudes, comenzó en septiembre de 2018 una huelga escolar frente al Parlamento sueco para pedir medidas contra el cambio climático.
Su acción inspiró un movimiento global, que le ha llevado a ser recibida por líderes mundiales y a intervenir en citas de alto nivel, como la celebrada en septiembre en la sede de la ONU, en Nueva York, o en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP25) del mes pasado, en Madrid.
CANDIDATURA AL NOBEL
Thunberg ha recibido varios galardones el último año por su labor y estuvo nominada al Nobel de la Paz 2019, que ganó el primer ministro etíope, Abiy Ahmed, por su iniciativa para resolver el conflicto fronterizo entre su país y Eritrea.
Dos diputados de izquierda suecos han vuelto a nominar este año a Thunberg y a su movimiento al Nobel de la Paz por sus esfuerzos por llevar la cuestión climática al centro de la discusión política.
EFE.