Naciones Unidas, 17 de enero de 2022.- El secretario general de la ONU, António Guterres, condenó este lunes el ataque de las milicias hutíes de Yemen contra el Aeropuerto Internacional de Abu Dabi y la zona industrial cercana de Mussafah, que dejó tres muertos y seis heridos.
Guterres recordó que «la ley internacional humanitaria prohíbe los ataques contra civiles y contra infraestructuras civiles», en referencia a las víctimas de este ataque realizado al parecer con drones y que provocó el incendio de una planta de combustible.
El secretario general de la ONU aprovechó para recordar que «no hay solución militar al conflicto en Yemen», por lo que las partes deben avanzar en pos de «un proceso político en vistas de un arreglo global y negociado» junto al enviado especial de la ONU para Yemen, Hans Grundberg.
Precisamente, Grundberg se encuentra hoy en Riad, capital de Arabia Saudí, donde ha mantenido contactos con las autoridades de ese país y representantes del Gobierno aliado de Yemen (al que combaten los hutíes), según dijo hoy el portavoz del secretario general, Stéphane Dujarric.
Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos son los dos principales sostenes del Gobierno de Yemen, junto a otros países árabes, pero pese a esta fuerza y al apoyo que les han prestado Estados Unidos, Reino Unido y Francia, no han logrado en siete años de guerra acabar con el movimiento hutí, apoyado principalmente por Irán.
La larga guerra de Yemen, que ha tenido como efecto 4 millones de desplazados, ha arrastrado al país a graves problemas económicos y humanitarios, hasta el punto de que veinte millones de yemeníes (de una población de treinta) dependen de la ayuda humanitaria internacional, según las cifras de las agencias de la ONU.
EFE