Medellín, Colombia, 18 junio de 2024.- Consternación y horror invaden a los habitantes del barrio San José La Cima, en el nororiente de Medellín, tras el hallazgo de un cuerpo desmembrado en un basurero y una zona boscosa. La aterradora confesión vino de un adolescente de 16 años, quien se presentó ante las autoridades afirmando haber cometido el macabro crimen.
La mañana de este martes, 18 de junio, el joven acudió a la Estación de Policía Manrique, donde narró cómo asesinó y desmembró a un hombre, arrojando las partes del cuerpo en diferentes ubicaciones. Según su testimonio, utilizó un arma blanca para matar a la víctima y desmembrarla posteriormente. Alegó que el hombre habría entrado en su vivienda con intenciones agresivas, lo que llevó al adolescente a defenderse de manera brutal.
Las autoridades, tras escuchar la confesión, se dirigieron a los lugares señalados por el menor, encontrando las partes del cuerpo en inmediaciones de la carrera 31A con la calle 84A, dentro de una maleta y costales. La Policía y un equipo de investigadores de la Sijín procedieron a recolectar las partes del cuerpo y realizaron una minuciosa inspección en la vivienda del adolescente, ubicada en la carrera 30 con la calle 85.
El proceso de recolección y análisis de pruebas en la escena del crimen fue exhaustivo. Los investigadores trabajaron en conjunto con forenses de Medicina Legal para tratar de identificar a la víctima, cuya identidad aún no ha sido establecida. Este aspecto crucial del caso está bajo la supervisión de expertos forenses, quienes esperan esclarecer la identidad de la víctima en los próximos días.
El menor de edad, ahora bajo custodia de la Policía de Infancia y Adolescencia, enfrentará un proceso judicial que determinará su responsabilidad en el asesinato y desmembramiento. Este incidente ha generado un profundo debate en la comunidad sobre la violencia juvenil y las condiciones que pueden llevar a un joven a cometer actos tan atroces.
Este caso marca el quinto homicidio en la comuna 3 (Manrique) en lo que va del año y el 141 en toda Medellín durante 2024. A pesar de estos números alarmantes, la ciudad ha visto una disminución en las muertes violentas en comparación con el mismo periodo de 2023, con 27 homicidios menos registrados hasta la fecha. Las autoridades locales y la comunidad trabajan conjuntamente para implementar estrategias que reduzcan la violencia y mejoren la seguridad en la ciudad.
El impacto del crimen y la respuesta de la comunidad reflejan la necesidad de enfoques integrales para abordar la violencia juvenil y apoyar a los jóvenes en situaciones de riesgo. Este trágico evento subraya la importancia de la prevención, la educación y el apoyo psicológico como componentes clave para construir una sociedad más segura y equitativa.
A.U.
Con información de Q’HUBO