Jerusalén, 24 de enero de 2025.- El grupo islamista palestino Hamás confirmó este viernes la muerte de dos de sus líderes, Rawhi Mushtaha y Sami Oudeh, meses después de que el Ejército israelí informara de su fallecimiento en un ataque en julio en la Franja de Gaza.
En un comunicado, Hamás informó de la muerte de Mushtaha, miembro de la oficina política de Hamás, y de Sami Oudeh, comandante del Mecanismo de Seguridad General (la policía interna), calificándolos de mártires, aunque no detalla las circunstancias ni el lugar donde murieron.
Según medios locales, ambos dirigentes fueron enterrados este viernes en una ceremonia conjunta en la ciudad Gaza.
A comienzos del pasado octubre, el Ejército de Israel anunció que, tres meses antes, había matado a Mushtaha, al que identificó como el «jefe del Gobierno» del Hamás en Gaza, en un ataque aéreo contra un complejo subterráneo en la Franja.
En el ataque también murieron Oudeh y Sameh al Siraj, responsable de seguridad en el buró político del grupo islamista, según las fuentes israelíes.
En el pasado, Mushtaha estuvo encarcelado en Israel junto a Yahya Sinwar, líder de Hamás en el enclave y cerebro de los ataques del 7 de octubre, y le ayudó a establecer el servicio de seguridad interna en el territorio.
El propio Sinwar murió el 16 de octubre en un enfrentamiento con soldados israelíes en la ciudad de Rafah en Gaza.
Según las fuerzas israelíes, Mushtaha tenía influencia directa en las decisiones sobre los movimientos de las tropas del grupo y estaba involucrado en decisiones militares.
En su comunicado de hoy, Hamás aboga por continuar la ‘yihad’ para derrotar a sus enemigos en su tierra sagrada y lograr establecer el estado independiente de Palestina con la capital en Jerusalén.
Hamás lanzó el 7 de octubre de 2023 un ataque en suelo israelí que causó unos 1.200 muertos y 250 rehenes capturados por el grupo islamista, lo que desencadenó una ofensiva israelí en Gaza que ha causado más de 45.000 muertos.
El pasado 15 de enero, Israel y Hamás llegaron a un acuerdo de alto el fuego que, en una primera fase, supone la liberación de 33 rehenes de forma gradual a cambio del excarcelamiento de más de 1.900 presos palestinos en cárceles israelíes.
EFE