Hermanos en Cali judicializados por presunto maltrato animal en clínica clandestina

413
Foto de la Fiscalía General de la Nación, FGN

Un perro y una tortuga murieron por los tratamientos inadecuados que les practicó el procesado.

También fue judicializada su hermana, quien administraba la clínica en la que, al parecer, se realizaban los procedimientos que ponían en peligro la salud de los animales.

Fiscalía General de la Nación,
FGN

CALI, VALLE DEL CAUCA (11 AGO 2024) – La Fiscalía General de la Nación ha judicializado a los hermanos Miguel Ángel y Luisa María Parrado Amado por su presunta responsabilidad en el delito de maltrato animal. Se alega que Miguel Ángel, haciéndose pasar por veterinario, realizó procedimientos quirúrgicos inapropiados que pusieron en riesgo la vida de varios animales, mientras que su hermana Luisa María, administradora de la clínica veterinaria, facilitó estas prácticas ilícitas.

La investigación, liderada por una fiscal del Grupo Especial para la Lucha contra el Maltrato Animal (Gelma), reveló que entre mayo de 2020 y marzo de 2024, en Cali, Miguel Ángel Parrado habría realizado al menos cuatro procedimientos quirúrgicos y médicos de manera improvisada, sin las condiciones adecuadas, lo que resultó en graves daños a los animales involucrados.

Uno de los casos más impactantes ocurrió el 30 de julio de 2021, cuando Parrado, empleado de una clínica privada, atendió una urgencia médica domiciliaria para un cachorro llamado Thor. Sin contar con las medidas de salubridad y asepsia necesarias, le practicó una operación en la sala de la vivienda. Como resultado de esta presunta negligencia, el canino falleció.

Otro incidente relevante sucedió el pasado 3 de marzo, en la clínica veterinaria que los hermanos Parrado habían establecido. Una gata llamada Arkana fue llevada al lugar con una fractura en una pata. Parrado utilizó una broca metálica de construcción para unir el hueso fracturado, un material inadecuado para estos procedimientos. Este error provocó daños en los tejidos y tendones de la gata, lo que llevó a la amputación de la extremidad.

Por estos hechos, la Fiscalía imputó a Miguel Ángel Parrado Amado el delito de maltrato animal y falsedad en documento público, ya que se hizo pasar por veterinario sin contar con los estudios necesarios para ejercer dicha profesión. Luisa María Parrado, por su parte, también fue imputada por su participación en las actividades ilegales de la clínica.

A.U.


La información contenida en este artículo de prensa corresponde a la narración de los hechos noticiosos objetivos, suministrados por los funcionarios encargados de adelantar las investigaciones penales al interior de la Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación. Para el momento de la divulgación de este comunicado, la situación jurídica de la(s) persona(s) relacionada(s) se encuentra pendiente de resolver por la autoridad judicial competente, siempre bajo los preceptos de la presunción de inocencia, consagrados en el artículo 29 de la Constitución Política y el artículo 7º de la Ley 906 de 2004.