Antioquia, Colombia, 6 agosto de 2024.- Durante el fin de semana, el Suroeste antioqueño fue escenario de actos violentos que dejaron tres personas asesinadas en dos municipios. El primer incidente ocurrió el viernes 2 de agosto en la vereda La Aguada, sector La Manchuria del municipio de Salgar. A la 1:30 p.m., Cristian Daniel Castañeda, de 25 años, fue encontrado muerto en una zona boscosa con un impacto de bala en la cabeza. Las autoridades locales, lideradas por la Unidad Básica de Investigación Criminal, están trabajando para esclarecer los motivos y encontrar a los responsables de este homicidio.
La violencia continuó en el municipio de Ciudad Bolívar, donde dos jóvenes fueron asesinados en el barrio La Colina durante la madrugada del domingo 4 de agosto. Sebastián David Ospina Marulanda, de 27 años, y Daniel Alejandro Quinchía Hincapié, de 26 años, fueron acribillados con múltiples disparos. Ambos jóvenes, quienes se dedicaban a la recolección de café, habían salido recientemente de un centro carcelario, según el informe preliminar de las autoridades.
El ataque en Ciudad Bolívar ocurrió alrededor de las 2:30 a.m. La Policía y el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) se desplazaron rápidamente al lugar de los hechos para realizar el levantamiento de los cadáveres y recolectar pruebas. Se ha implementado un dispositivo de seguridad reforzado en el área mientras los investigadores trabajan en identificar los móviles del crimen y dar con los autores materiales e intelectuales de estos asesinatos.
La comunidad de Ciudad Bolívar está consternada por el doble homicidio, y la Policía ha intensificado las medidas de seguridad y vigilancia para prevenir más actos de violencia. La recolección de pruebas incluye entrevistas con posibles testigos y el análisis de cámaras de seguridad en la zona.
En Salgar, la investigación sobre la muerte de Cristian Daniel Castañeda se centra en entender el contexto de su asesinato, ya que fue encontrado en una zona aislada, lo que sugiere que pudo haber sido llevado allí contra su voluntad antes de ser asesinado.
Estos incidentes destacan la preocupante situación de seguridad en el Suroeste antioqueño, donde los habitantes demandan una mayor presencia de las fuerzas de seguridad y una intervención efectiva para combatir la criminalidad. Las autoridades locales y departamentales están bajo presión para ofrecer respuestas rápidas y efectivas que aseguren la tranquilidad de la región.
La Defensoría del Pueblo ha reiterado la importancia de reforzar las medidas de protección y seguridad en las zonas rurales y urbanas afectadas por la violencia. La comunidad espera que estos casos no queden impunes y que se tomen medidas contundentes para evitar que estos hechos se repitan.
A.U.