Hong Kong empezará, a partir del próximo sábado, a someter a una cuarentena obligatoria de 14 días a todas las personas que accedan a la región administrativa especial procedentes de la China continental como medida de contención y control del coronavirus.
La jefa del Ejecutivo hongkonés, Carrie Lam, anunció este miércoles la medida, que, según prevé, reducirá el flujo de visitantes a la ciudad, donde varios sectores demandan un cierre completo de las fronteras con la China continental. Cuatro de los catorce pasos fronterizos permanecen abiertos.
«Puedo decirles que es una medida muy estricta», indicó Lam a los periodistas. «Tras poner en marcha anteriores medidas, los viajeros hacia Hong Kong pasaron de 170.991 el 29 de enero a 28.675 el 4 de febrero. Ese número sin duda se reducirá después de esta medida».
Asimismo, la jefa del Gobierno hongkonés aseveró que un cierre total de las fronteras con la China continental no sería práctico habida cuenta de la estrecha relación entre ambos territorios.
«También afectaría al suministro de alimentos y otros bienes en Hong Kong», apuntó.
Mientras tanto, este jueves es el cuarto día consecutivo de huelga de personal sanitario de Hong Kong que demanda, entre otras cuestiones, un cierre total de las fronteras con la China continental.
En Hong Kong pesa todavía el traumático recuerdo de la epidemia del Síndrome Respiratorio Agudo y Grave (SARS, en su acrónimo inglés), originado también en China y que se cobró en la ciudad casi 300 de las 774 víctimas que hubo en 2003 en todo el mundo.
Por el momento, Hong Kong ha certificado una muerte entre los 21 infectados del coronavirus causante de la neumonía de Wuhan detectados hasta ahora en la ciudad semiautónoma.
El virus ha dejado ya al menos 563 muertos entre los 28.018 infectados en la China continental, además del citado deceso en Hong Kong, y otro más sucedido en Filipinas el pasado fin de semana.
Aunque una veintena de países cuentan con casos diagnosticados de neumonía de Wuhan, China acapara en torno al 99 % de los infectados.
Los síntomas del nuevo coronavirus, denominado 2019-nCoV, son en muchos casos parecidos a los de un resfriado, pero pueden venir acompañados de fiebre y fatiga, tos seca y disnea (dificultad para respirar).
EFE