Teherán, 4 abr – El Ministerio de Exteriores de Irán insistió este domingo en «la importancia de la paz y la estabilidad» en Jordania, donde se registraron varios arrestos y el ex príncipe heredero, Hamzah bin Huseín, denunció estar confinado en su palacio.
«La República Islámica de Irán se opone a cualquier injerencia extranjera y cree que todos los asuntos internos de los países deben solucionarse en el marco de la ley», dijo el portavoz de Exteriores, Said Jatibzadeh, quien advirtió asimismo en un comunicado que cualquier inestabilidad interna o tensión en la región de Asia Occidental «beneficia al régimen sionista (Israel)».
«La huella de este régimen siempre se puede encontrar en cualquier sedición en los países islámicos», agregó Jatibzadeh tras destacar las amistosas relaciones entre Teherán y Amán.
Las autoridades jordanas han anunciado la detención de varias personas, incluido un miembro de la Casa Real y un exasesor del rey Abdalá II.
Además, el hermanastro del monarca y ex príncipe heredero dijo en un vídeo publicado por la BBC que no se le permite salir de su palacio ni comunicarse con el exterior, y que le han cortado internet y el teléfono.
Por su parte, las Fuerzas Armadas de Jordania pidieron a Hamzah bin Husein que detenga sus actividades «en contra de la seguridad y estabilidad» del país, en alusión a una serie de reuniones en las que se había criticado al Gobierno jordano y al rey Abdalá II.
Hamzah negó formar parte de «ninguna conspiración ni de ninguna agenda externa» si bien criticó en la grabación «los fallos en el Gobierno, la corrupción y la incompetencia en los últimos 15 o 20 años».
Tras la muerte del rey Husein, en febrero de 1999, Hamzah fue nombrado príncipe heredero, pero Abdalá II lo relevó del cargo en 2014 y nombró en su lugar a su hijo, el príncipe Husein bin Abdalá.