Jerusalén, 20 de diciembre de 2021.- Israel aprobó hoy la ampliación de la lista roja de países donde los israelíes tienen vetado viajar por la expansión de la variante ómicron, incluyendo en ella a EE. UU., Italia, Alemania, Portugal, Marruecos, Turquía, Hungría, Bélgica, Suiza y Canadá.
«Los ministros del Gabinete aprobaron la ampliación de la lista de Estados rojos, según la recomendación» de ayer del Ministerio de Sanidad, informó la oficina del primer ministro, Naftali Benet.
Según concretó, la medida entrará en vigor en la medianoche del martes 21 e implica que se prohíbe a los ciudadanos israelíes viajar a todos estos países, salvo si se obtiene un permiso especial y justificado.
A su vez, están obligados a ponerse en cuarentena entre una semana y 10 días si regresan de estos lugares, dependiendo de si están vacunados o no.
Ante la propagación mundial de ómicron, Israel ha ido ampliando durante estas últimas semanas los países de su lista roja. Entre estos ya está la mayoría de Estados de África, Reino Unido o países de la Unión Europea (UE) como España, Francia, Irlanda, Bélgica o Suecia, los cuales fueron incluidos la semana pasada.
A fines de noviembre, para protegerse ante la nueva cepa, Israel cerró sus fronteras a turistas, mientras a nivel interno mantiene una vida cotidiana relativamente normal, sin grandes restricciones.
«Tenemos que mantener la economía y la educación» abiertas «tanto como podamos», declaró ayer Benet, en una rueda de prensa en que alertó que la quinta ola de contagios en Israel ya es algo patente.
Las cifras de contagios dentro del país «no son altas todavía, pero podemos decir que la quinta ola ha comenzado», aseguró, e instó de nuevo a los padres a vacunar a sus hijos de entre 5 y 11 años para obtener una mayor protección ante la nueva variante.
Las autoridades sanitarias detectaron ayer 40 contagios de la nueva cepa, que ya ascienden a 175 casos; mientras que el país registró en las últimas 24 horas más de 1.000 nuevos contagios de covid-19, cifras que no se alcanzaban desde hacía más de dos meses, con un ratio de infección del 1,09%.
Desde el inicio de la pandemia, Israel ha sido uno de los países que ha tomado medidas más rígidas y contundentes hacia el exterior para contener la propagación del virus.
Todo ello pese a que actualmente la mayoría de personas que llega desde fuera -solo israelíes o extranjeros con permiso de residencia- entra con certificados de vacunación, varias pruebas PCR y debe aislarse al menos tres días, mientras que en el interior del país las medidas restrictivas son más bien laxas.
EFE