Antioquia, Colombia, 9 de enero de 2022 – A través de un comunicado, la Jurisdicción Especial para la Paz -JEP- determinó que la masacre perpetrada en San José de Apartadó los días 20 y 21 de febrero de 2005, es un crimen de guerra y de lesa humanidad y que, por lo tanto, no prescribe.
La matanza ocurrió en las veredas La Resbalosa y Mulatos Medio, corregimiento de San José de Apartadó, de Apartadó, Urabá antioqueño. Las víctimas fueron ocho personas: tres niños y cinco adultos entre hombres y mujeres. Según testigos, el ataque habría sido realizado por el Ejército Nacional y paramilitares del bloque Héroes de Tolová, de las Autodefensas Unidas de Colombia.
Según Caracol Radio, líderes sociales de la región celebraron la decisión de la JEP. Jesús María Cataño, uno de los líderes, dijo a la emisora que es relevante y de suma importancia que se conozca la verdad y se “responsabilice a los perpetradores, quienes serían miembros del Ejército Nacional y grupos paramilitares”.
Cataño afirmó al medio de comunicación que la disposición “genera que se tenga que compensar a las victimas e investigar a los responsables hasta las últimas consecuencias”.
En 2019, el coronel Orlando Espinosa Beltrán, condenado a 34 años de prisión por homicidio, pidió a la JEP que desistiera de seguir investigando la masacre de San José de Apartadó por falta de pruebas. La JEP entonces se pronunció y solicitó “recalificar” las conductas por las que se condena a Espinosa Beltrán, pero declara su “imprescriptibilidad”. Así las cosas, las investigaciones continuarán.
