Lisboa, 14 de febrero de 2023.- La orden religiosa Compañía de Jesús en Portugal reconoció tener registro de 11 jesuitas y un laico, «todos ya fallecidos», que abusaron sexualmente de «por lo menos» 24 menores desde el año 1950, la mayoría en ambiente escolar.
La orden precisó en un comunicado que las víctimas registradas tenían entre los 7 y 17 años en el momento de los hechos, que la «gran mayoría» era de sexo masculino, que los supuestos abusadores tenían entre 24 y 65 años de edad durante las agresiones y que «en algunos casos» eran «prácticas reiteradas».
«La mayor parte» ocurrió en el contexto escolar, incluyendo «lugares para dormir (el más antiguo, cuando aún había un internado)» y espacios donde los estudiantes estaban a solas con el abusador, como oficinas, enfermería y clases, aunque también hay denuncias de abusos cometidos en el contexto de acompañamiento espiritual.
Las agresiones incluyeron «tocamientos en zonas íntimas y manipular los genitales», explicaron los jesuitas, que reconocieron que algunos documentos solo hablan de «abuso sexual» sin explicar los hechos, por lo que «se pueden haber practicado actos más invasivos».
Estos abusos estarían incluidos en el informe divulgado este lunes por una comisión de expertos que ha investigado durante un año la dimensión de la pederastia en la Iglesia católica en Portugal, que recoge que al menos 4.815 menores han sido víctimas de abusos sexuales en los últimos 72 años.
El comunicado precisa que las víctimas dijeron a la comisión que no contaron las agresiones en el momento de los hechos, que «hablaron con sus familiares mucho después» y que «solo unas pocas personas denunciaron su caso» a la orden.
Sus archivos les «llevan a creer» que fueron tomadas medidas contra los sacerdotes que sí fueron denunciados, como apartarlos o aislarlos en recintos religiosos con la prohibición de ejercer su actividad.
«Hubo casos en los que el proceso llevó al sospechoso a abandonar la Compañía de Jesús. No tenemos información de que haya habido procesos judiciales o canónicos. En ningún caso hubo comunicación a la Fiscalía», añadió la orden.
«Con pesar, lamentamos que no siempre se hayan tomado las medidas que hoy consideramos adecuadas, es decir, en lo que respecta a la atención y protección de las víctimas», aseguraron los jesuitas.
El informe divulgado este lunes confirma que Portugal no fue una excepción y que, como en países vecinos, los abusos fueron una práctica durante años, en especial entre las décadas de 1960 a 1990.
Además, la comisión calcula que en Portugal hay más de 100 sacerdotes sospechosos de haber abusado de menores todavía en activo.
EFE