Panamá, 24 sep (EFE).- La Policía Nacional de Panamá apeló al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) para capacitar «de emergencia» a sus miles de agentes en materia de derechos humanos, ante las crecientes denuncias de abuso policial contra los ciudadanos en medio de la pandemia, afirmó a EFE el director del organismo de seguridad, Jorge Miranda.
Llevarse casi a rastras a una chica que paseaba su perro, amenazar con «complicarle la vida» a un extranjero que no portaba su carné de Migración pero sí la licencia de conducir, golpear a un chef por negarse a realizarse la prueba de alcoholemia por sentirse en riesgo de contagiarse de la COVID-19, retener a dos mujeres por darse un beso o negar el acceso a un supermercado a una persona transexual.
Esos son algunos de los episodios que despertaron la indignación ciudadana frente a actos entendidos como «abusos» cometidos por parte de los agentes de la Policía Nacional, el organismo encargado de velar por el cumplimiento de las restricciones impuestas desde marzo en el país para frenar la expansión del nuevo coronavirus.
«Todos somos seres humanos con virtudes, con defectos y pudiese, en un momento determinado, una unidad (agente) cometer un error que pudiera calificarse como un exceso en el uso de la fuerza, que se traduce entonces en un abuso contra el ciudadano», afirmó el comisionado Miranda.
Indicó que «conscientes de esa realidad, viendo que aumentaban los niveles de tensión tras cuatro meses» de confinamiento y crecía la «cantidad y calidad de altercados» entre los agentes y los ciudadanos, se diseñó una «capacitación de emergencia para toda la fuerza policial en materia de los Derechos Humanos y la forma de actuar» en esta situación tan particular derivada de la pandemia.
En ese diseño participaron el CICR, la Procuraduría General de la Administración, la Defensoría del Pueblo y el Ministerio Público, precisó el comisionado.
«Sacamos un extracto del Manual de Proteger y Servir del CICR, donde se ve el tema del uso de la fuerza, derechos humanos, lo que tiene que ver con el orden público, puesto que es lo que hemos estado viviendo en estos meses, y ya llevamos más de 4.000 agentes capacitadas en seminarios con la CICR, con la Defensoría del Pueblo», afirmó Miranda.
A pesar de que existen procedimientos establecidos en la Policía Nacional, que «es una institución respetuosa de las leyes, de los derechos humanos», los agentes «tienen que actualizarse, y tener esta información fresca contribuye significativamente para tener un mejor criterio a la hora de tomar una decisión» en medio de la tarea diaria en calle, añadió.
Miranda aseguró que los agentes involucrados «en casos leves» de abuso policial han sido llevados ante la Junta Disciplinaria de la institución y se les han impuesto las sanciones correspondientes.
Pero hay algunos casos más graves «que no se han resuelto, estamos haciendo nuestras investigaciones», añadió sin más detalles.
EFE