Mineápolis (EE.UU.), 30 mar– Uno de los hermanos de George Floyd, Philonise Floyd, criticó este martes que el equipo de defensa legal del exagente de policía Derek Chauvin, acusado de matar a Floyd, esté «tratando de asesinar la reputación» del afroamericano.
«(Chauvin) está luchando por su vida, al igual que yo estoy luchando por la vida de mi hermano. Hemos visto el video, tenemos hechos. Ellos están tratando de asesinar su reputación. Cuando no tienes hechos, eso es lo que tienes que hacer», dijo Floyd a la cadena de televisión CNN el día después de la primera jornada de deliberaciones orales del juicio, que se celebra en Mineápolis (Minesota, EE.UU.).
A pesar de que el momento exacto en el que falleció Floyd, con Chauvin presionando su cuello con la rodilla, fue grabado, la defensa del exagente puso sobre la mesa otras posibles causas de la muerte, y habló de la combinación de una enfermedad cardíaca subyacente, el uso de fentanilo y «la adrenalina que fluía por su cuerpo» en el momento de su deceso.
Preguntado por cómo se sintió durante el primer día del juicio a Chauvin, el hermano de Floyd aseguró que fue como una «montaña rusa emocional» y dijo que hasta este lunes no sabía que el exagente había puesto su rodilla sobre el cuello de Floyd durante 9 minutos y 29 segundos, en vez de los 8 minutos y 46 segundos que se habían hecho populares.
«El video, cada vez que lo veo, solo escucho ocho minutos y 46 segundos. Nunca trato de ver el video completo. No es algo que quieras ver: tu hermano fue torturado y gritó y preguntó por nuestra mamá y dijo: ‘Dile a mis hijos que los amo’, ‘No puedo respirar'», comentó Philonise.
Durante la jornada inaugural de este lunes, uno de los fiscales, Jerry W. Blackwell, se dirigió a los 12 miembros del jurado y anunció que su objetivo es demostrar que Chauvin es «de todo menos inocente» y que debe ser condenado por el presunto asesinato el 25 de mayo de 2020 de Floyd.
El ahora expolicía está acusado de los cargos de asesinato en segundo grado, penado con hasta 40 años de cárcel; asesinato en tercer grado, con una condena máxima de 25 años; y homicidio en segundo grado, que acarrea hasta 10 años de privación de libertad.
El proceso contra Chauvin ha atraído una gran expectación mediática ya que la muerte de Floyd provocó el estallido de masivas protestas raciales a lo largo y ancho de Estados Unidos que pusieron contra las cuerdas al Gobierno de Donald Trump.