Naciones Unidas, 9 octubre.- El Consejo de Seguridad de la ONU llamó este viernes a Turquía a dar marcha atrás a su decisión de reabrir el barrio costero de Varosha, en el norte de Chipre, un área que lleva 46 años sellada como zona militar y considerada clave en el conflicto en la isla.
En una declaración pactada por los quince Estados miembros, el Consejo de Seguridad expresó su «profunda preocupación» por el anuncio de Ankara y urgió a evitar «acciones unilaterales que puedan elevar las tensiones» en Chipre.
El máximo órgano de decisión de la ONU reafirmó el estatus de Varosha que figura en varias de sus resoluciones, que consideran inadmisible cualquier intento de poblar Varosha con personas distintas a los antiguos habitantes del área.
La playa de Varosha se encuentra cerca del puerto de Famagusta, el principal centro turístico de Chipre antes de que fuera abandonado tras la ocupación del norte de la isla por Turquía en 1974, y lleva 46 años sellada como una zona militar.
Mientras que a lo largo de los años Famagusta ha recuperado su número original de habitantes, unos 40.000, aunque no los originales, la zona de Varosha quedó cerrada con una verja y alambres por las fuerzas armadas turcas.
La reapertura, que ha desencadenado un reguero de críticas a todos los niveles, fue anunciada desde Ankara por el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, junto al primer ministro de la autoproclamada República Turca del Norte de Chipre (RTNC), el nacionalista Ersin Tatar, candidato en las elecciones presidenciales turcochipriotas del próximo domingo.
El pronunciamiento del Consejo de Seguridad se produjo este viernes tras una reunión a puerta cerrada, solicitada por las autoridades chipriotas, que consideran que el movimiento turco viola las resoluciones de la ONU sobre la cuestión.
La disputa se pronuncia en un periodo de especial tensión, por las prospecciones de Turquía en aguas del Mediterráneo de soberanía o que se solapan con las zonas económicas exclusivas de Grecia y Chipre y que la Unión Europea considera ilegales.
EFE