Bogotá, 16 de marzo de 2022.- Las autoridades colombianas, lideradas por la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD), entregaron este miércoles los restos del torero de corralejas Andrés Julio «El Calvo» Erazo, quien había desaparecido hace 19 años en el departamento caribeño de Sucre.
En un acto solemne realizado en la Plaza de Toros de San Onofre, donde el torero era aclamado por el público a principios de siglo, la UBPD, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), la Fiscalía y la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas (UARIV) entregaron dignamente el cuerpo de Erazo a su familia y amigos en el mismo lugar donde hace 19 años le vieron por última vez.
«La Unidad de Búsqueda debe garantizar la verdad sobre la suerte de las personas desaparecidas y, cuando sea posible, su paradero. Seguramente, en muchos casos no podremos determinar el paradero pese a todo el propósito, la tecnología y la metodología. Pero lo que sí tienen que saber la sociedad y las víctimas es cuál fue la suerte de las personas desaparecidas», expresó la directora de la UBPD, Luz Marina Monzón.
EL CASO DEL TORERO
Erazo fue visto por última vez el 19 de marzo de 2003 cuando participaba de una corraleja, como se conoce a las fiestas populares de toros del Caribe colombiano, en la población de Berrugas y fue sacado a la fuerza por un grupo armado, tras lo cual nunca se volvió a saber de él.
Dos años después, una persona, en una diligencia judicial, dio información que permitió recuperar 82 cuerpos que, al parecer, eran víctimas de desaparición forzada.
En 2019, la JEP decretó medidas cautelares para proteger zonas de interés forense donde, al parecer, había cuerpos de víctimas de desaparición forzada e impulsar la identificación de los restos recuperados en la Hacienda El Palmar, que estaban en laboratorios del Instituto Nacional de Medicina Legal.
La Unidad tomó muestras a familiares de víctimas de desaparición y consiguió así información valiosa para el impulso de la identificación de los cuerpos recuperados.
«Hoy cesa la pregunta que Mariana le hacía al río, hoy por fin puede dejar de preguntarse ‘¿dónde estás hermanito?’. Desde ahora podrán ella y sus demás familiares acudir a su lugar de reposo para que esta vez sea él quien les guarde sus secretos», expresó durante la entrega el magistrado de la JEP Alejandro Ramelli.
Esta es la novena entrega digna que hacen la JEP, la UBPD, la FGN y la UARIV de víctimas de desaparición forzada en el departamento de Sucre.
EFE