Vitoria, 12 octubre.– El director de La Vuelta, Javier Guillén, prometió este martes organizar “la carrera con más medidas sanitarias de todas las pruebas” junto con el Tour de Francia y añadió que esta edición contará con unas “medidas extremas” para evitar brotes y contagios de la covid-19 que puedan llevar a su suspensión.
El máximo responsable de la carrera presentó la etapa alavesa que tendrá lugar en la séptima jornada, el 27 de octubre, y que unirá Vitoria con Valdegovía en un recorrido de 159,7 kilómetros, con dos pasos por el Alto de Orduña, de primera categoría, y rampas del 14 % de desnivel medio y un último paso a 18 kilómetros de meta.
“Estamos preocupados desde marzo, tenemos que reforzar las medidas y ver la experiencia de otras carreras”, aclaró Guillén, que afirmó que se están apoyando en el Tour de Francia, propietario de La Vuelta, y que tienen “un protocolo validado por la UCI (Unión Ciclista Internacional) y por las Consejerías de Salud”.
Sobre las medidas a tomar expresó que “lo importante es detectar dónde puede haber algún contagio” y que lo harán a través de test que procederán de la organización y de un laboratorio propio que tendrán en carrera. Del mismo anunció que el pelotón se someterá a diferentes pruebas antes de llegar a Vitoria, donde se estima que pernoctarán dos noche entre 1.500 y 2.000 personas.
“Hoy por hoy no existe ninguna limitación a que se celebre y sortearemos las incidencias si surgen porque es una carrera flexible”, aseguró el director, que prefirió una Vuelta sin público antes de que no se lleve a cabo la prueba porque a su juicio “se va a poder disfrutar”.
En este sentido, todas las instituciones animaron a los aficionados a ver la etapa a través de la televisión para evitar aglomeraciones. “El público es el alma del deporte y se verá con resignación, pero tengo que apelar a todos los aficionados”, reconoció Guillén que manifestó que contarán con 40 miembros de seguridad privada, además de la Policía Autónoma Vasca para controlar la presencia de público en puntos estratégicos como los puertos de montaña.
El recorrido está diseñado por el exciclista Joseba Beloki que intuyó una “etapa nerviosa” con repechos en el inicio y un “bucle final con una bajada del puerto de Barrerilla”. Además destacó el buen estado de la calzada en el Alto de Orduña y apostó por “una etapa acumulativa con un grupo pequeño que llegará al sprint en Valdegovía”.
El director de carrera, por su parte, no se atrevió a hacer un pronóstico deportivo y subrayó que será una etapa “impredecible” porque podría concluir con una escapada o un sprint final.
En esta presentación también estuvieron presentes el diputado general de Álava, Ramiro González; y los alcaldes de Vitoria, Gorka Urtaran, y de Villanueva de Valdegovía, Juan Carlos Ramírez-Escudero. Todos ellos apostaron por un evento de esta envergadura para dar a conocer el territorio y celebraron que La Vuelta apueste por la provincia alavesa, donde tuvo su primer idilio en 1956 con la primera salida y meta en Vitoria en dos etapas que unieron la capital vasca con Bilbao.
Hasta la fecha, La Vuelta ha salido de Álava en 25 ocasiones y ha llegado a la provincia vasca en otras 22, pero hacía nueve años que no había una meta en este Territorio Histórico. A esto hay que añadir que será la segunda vez en la historia de la carrera que Álava tenga salida y meta en una misma etapa desde la edición de 1967.
EFE