Bogotá, 15 octubre de 2021.- Pese a que Colombia quedó mejor ubicada en la tabla de clasificaciones de las eliminatorias suramericanas al Mundial tras la triple jornada en la que igualó 0-0 todos los partidos, el equipo de Reinaldo Rueda dejó dos grandes deudas: una mayor efectividad y solvencia para crear oportunidades.
La selección cafetera subió del quinto al cuarto lugar y ahora está ubicado en uno de los puestos de clasificación directa al Mundial de Catar, a lo que debe sumarse que los rivales que estaban más cerca, Perú y Paraguay, apenas consiguieron tres y un punto, respectivamente.
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Colombia, por su parte, igualó 0-0 con Uruguay en Montevideo y con Brasil y Ecuador en Barranquilla, con lo que llegó a 16 unidades y superó, por diferencia de goles, a la Celeste que apenas consiguió un punto en sus tres partidos.
Lo más positivo que se llevó el equipo de Rueda, además de la ratificación de Ospina como uno de los mejores porteros, es que, hasta el momento, ha sido el único que le ha arañado puntos a Brasil, pues el resto de rivales perdió contra la Canarinha.
DIFICULTADES PARA CREAR
Los colombianos tuvieron dificultades para crear oportunidades en todos los juegos e incluso se vieron sometidos por sus rivales en los primeros tiempos, en los que el equipo fue sostenido por las atajadas de Ospina y el alto nivel de Carlos Cuesta, el central de 22 años que arrebató la titularidad a Davinson Sánchez.
En este punto, es clave recalcar que, a diferencia de los partidos anteriores, en estos tres encuentros Colombia tuvo que enfrentarse con un conflicto interno: el bajo nivel de jugadores importantes como Juan Guillermo Cuadrado y Matheus Uribe, que sintió el equipo especialmente ante Ecuador y Uruguay.
En este contexto apareció como agua en el desierto Juan Fernando Quintero, que a pesar de no sobresalir con constancia en los partidos fue uno de los pocos que acercó al equipo a las porterías rivales con sus pases filtrados o sus remates de media distancia que hicieron estirar a Fernando Muslera y a Alisson.
INEFICACIA DE CARA AL ARCO
Si a la poca creación se suma la ineficacia de cara al arco, ahí se puede explicar por qué Colombia no anotó goles en ninguno de los tres partidos.
En este punto la cruz más pesada la carga Duván Zapata, que a diferencia de lo que ocurre en el Atalanta no ha logrado encontrar una buena racha con la selección.
Justamente contra Uruguay, cuando entró en los minutos finales, desperdició la oportunidad más clara del partido. ‘El Toro’, solo en el área frente a Muslera tras una gran jugada individual de Luis Díaz por la izquierda, sacó un remate que terminó dirigido al cuerpo del guardameta charrúa.
Zapata, que en el Atalanta lleva tres goles y cinco asistencias esta temporada, anotó su último gol con Colombia el 9 de octubre del año pasado en la goleada por 3-0 a Venezuela en Barranquilla.
Otros casos fueron los de Radamel Falcao García y Rafael Borré, a quienes el equipo dejó muy pocas veces en posiciones cómodas de remate y, en las oportunidades que tuvieron, se encontraron con las descomunales atajadas de los porteros rivales.
EQUIPO EN DEUDA
Como lo dijo el centrocampista Gustavo Cuéllar tras el partido con Ecuador, los jugadores salieron del campo «con un sinsabor porque quedamos en deuda».
«Algo falta y tenemos que revisarnos porque, aunque creamos chances de gol, el balón no entró. En Barranquilla teníamos que ganarle a Brasil o a Ecuador y lograr cinco de los nueve puntos posibles, pero no se logró», dijo.
Sin embargo, el contexto favoreció al equipo de Rueda que quedó bien ubicado en la tabla y tendrá que ratificarlo en la próxima doble jornada, programada para noviembre, en la que visitará a Brasil y recibirá a Paraguay en Barranquilla.
Habrá que ver si, de recuperarse y tomar ritmo en la liga de Catar, James Rodríguez hará parte del equipo y le dará el impulso que le falta para cerrar el 2021 con un pie en el Mundial de Catar.
Jorge Gil Ángel
EFE