Ceuta/Melilla (España), 17 de mayo de 2022.- Las fronteras entre España y Marruecos en las ciudades de Ceuta y Melilla (norte de África) reabrieron este martes con normalidad y fueron atravesadas por miles de ciudadanos en ambos sentidos, más de dos años después de su cierre ante la llegada de la pandemia de covid-19.
La reapertura fronteriza tiene lugar justo un año después de que en mayo de 2021 unas 12.000 personas entraran en Ceuta en la mayor crisis migratoria de la historia con Marruecos, ocurrida en medio de la fuerte tensión diplomática que generó la acogida en un hospital español del líder de Frente Polisario, Brahim Gali, y que conllevó la llamada a consultas de la embajadora de Marruecos en Madrid.
Esta crisis se zanjó después de que el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, apoyara la propuesta de Rabat de una autonomía bajo soberanía marroquí del Sahara Occidental, antigua colonia española, y la posterior visita, el pasado 7 de abril, de Sánchez a la capital marroquí.
En esta visita, el jefe del Ejecutivo español y el rey de Marruecos, Mohamed VI, acordaron la normalización de las relaciones bilaterales, entre otras medidas, mediante la reapertura gradual de las fronteras.
Hoy comenzó la primera fase de esa reapertura, que permitió cruzar a los ciudadanos y residentes de la Unión Europea y personas autorizadas a circular en el espacio Schengen (espacio de libre circulación europeo).
Un total de 3.601 personas y 1.232 vehículos pasaron las fronteras de Ceuta y Melilla en las primeras doce horas desde la apertura esta medianoche, según los datos facilitados por las delegaciones del Gobierno de ambas ciudades, que no informaron de ningún incidente.
UNA GRAN ALEGRÍA A AMBOS LADOS DE LA FRONTERA
En los dos pasos fronterizos se vivió un ambiente de gran expectación, sobre todo en los primeros momentos, con cientos de personas como testigos de un momento que muchos calificaron de «histórico».
Por razones económicas y familiares, muchas personas pasan a diario la frontera desde Marruecos a España y viceversa, pero durante más de dos años se vieron privados de esta posibilidad.
El trasiego fronterizo se cifra en más de 3.000 vehículos al día y más de 20.000 personas, que de pronto, se vio interrumpido el 13 de marzo de 2020, salvo excepciones, como los denominados «pasillos humanitarios» para posibilitar el regreso a Marruecos de centenares de trabajadores transfronterizos que no habían podido volver a su país.
En Melilla, cuando los agentes de la Policía española abrieron la verja instantes después de la medianoche de hoy lo hicieron entre vítores y gritos de alegría que llegaban desde el lado marroquí y, sobre todo, desde la rotonda de la parte española, donde decenas de personas siguieron la cuenta atrás cuando las agujas del reloj se acercaban a la hora prevista.
La primera mujer en cruzar la frontera de Ceuta, Fauzía, natural de Marruecos, resumía la singularidad del momento: «Estoy muy contenta porque llevamos dos años sin poder ver a nuestras familias, a pesar de tener papeles no hemos podido cruzar por el cierre y es una gran alegría, algo muy especial», dijo a Efe.
ABSOLUTA NORMALIDAD SEGÚN EL GOBIERNO
El Gobierno español aseguró que la reapertura de las fronteras se ha producido «con absoluta normalidad», entre otros motivos, gracias a que se ha reforzado la presencia de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en ambas ciudades con 220 nuevos agentes.
Según la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de este martes, «en los últimos años» se ha recuperado un 10 % de los agentes con presencia en Ceuta y Melilla, hasta un total de 1.060 en las dos ciudades.
Después de la primera fase que comenzó hoy, a partir del próximo 31 de mayo podrán acceder a España por los pasos fronterizos de Ceuta y Melilla los trabajadores transfronterizos legalmente reconocidos, así como aquellos que, por caducidad de la tarjeta que les acredita como tales, han obtenido un visado específico para ambas ciudades autónomas.
EFE