Katmandú, 29 sep – Las intensas lluvias monzónicas han provocado inundaciones y deslizamientos de tierra en Nepal, causando la muerte de al menos 148 personas y la desaparición de decenas. El valle de Katmandú, epicentro de la catástrofe, ha sido el más afectado, con 73 víctimas mortales reportadas.
Las inundaciones han causado daños masivos a infraestructuras como viviendas y puentes, dejando a miles de personas sin hogar. Equipos de rescate trabajan arduamente para localizar a los desaparecidos y brindar asistencia a los afectados, pero se enfrentan a grandes desafíos debido a las condiciones climáticas adversas y a carreteras bloqueadas.
El inspector general adjunto de la Policía Armada, Kumar Neupane, explicó a EFE que se han movilizado efectivos de seguridad para retirar escombros y abrir carreteras clave en todo el país. Hasta ahora se han rescatado y trasladado a una zona segura a 3.626 personas.
Las autoridades nepalíes han informado de que el número de víctimas mortales podría seguir aumentando a medida que avanzan las operaciones de búsqueda y rescate.
Además de las muertes, se han reportado decenas de heridos y miles de desplazados.
La capital nepalí, Katmandú, ha sido una de las zonas más afectadas por las inundaciones. El sábado se registró el nivel de lluvia más alto en décadas, lo que provocó el desbordamiento de ríos y la inundación de barrios enteros.
Según Neupane, los rescatistas ha recuperado 35 cuerpos enterrados por corrimientos de tierra en la zona de Jhyaple Khola de Dhading, en la carretera de Prithvi, que conecta el valle de Katmandú.
«Un autobús y dos microbuses fueron encontrados enterrados en el corrimiento de tierra. La policía ha estado recuperando los cuerpos desde el domingo por la mañana», dijo.
Un sistema de baja presión sobre la Bahía de Bengala provocó lluvias prolongadas este año. El monzón, que normalmente comienza a mediados de junio y termina a finales de septiembre, se extenderá este año hasta la primera semana de octubre.
El Gobierno de Nepal ordenó hoy el cierre de las escuelas del país del Himalaya por al menos tres días, en un esfuerzo por mitigar el impacto de las generalizadas inundaciones.
Esta decisión, tomada en una reunión de gabinete de emergencia, busca proteger la seguridad de estudiantes y personal educativo, indicó en un comunicado el portavoz del ministerio de Educación, Laxmi Prasad Bhattarai.
La interrupción del transporte, los daños a los edificios escolares y el grave impacto en las comunidades han obligado al Gobierno a tomar esta medida. Además, se ha decidido posponer todos los exámenes en curso debido a las condiciones climáticas extremas.
El valle de Katmandú, epicentro de las inundaciones, registró ayer el mayor nivel de lluvia desde 1970. Miles de hogares han quedado sumergidos y las autoridades temen que el número de víctimas mortales siga aumentando.
Sharmila Sharma, que vive en una habitación alquilada en la capital nepalí, relató a EFE cómo el agua llegó a inundar su hogar hasta un metro de altura. «Esta ha sido una de las peores inundaciones que he visto en Katmandú en los últimos 30 años», dijo.
Videos y fotos en las plataformas de redes sociales y los medios locales mostraron a personas tratando de movilizarse con el agua hasta la cintura. En muchos lugares, los residentes utilizaban cubos para vaciar sus casas llenas de agua.
EFE