La cifra de homicidios entre enero y julio de 2020 en El Salvador se redujo un 59,6 % en comparación con el mismo período del 2019, pero el país superó el índice considerado epidemia a nivel internacional, de acuerdo con datos proporcionados a Efe.
Las cifras del Ministerio de Seguridad indican que en los primeros siete meses de 2020, el país centroamericano acumuló 698 muertes violentas, frente a las 1.730 del 2019 con una diferencia de 1.032 asesinatos menos.
El Gobierno de Nayib Bukele atribuye la marcada disminución de este delito a su plan de seguridad enfocado en tratar de recuperar el control de los territorios dominados por las pandillas y en cortar sus fuentes de financiación.
No obstante, expertos locales e internacionales, como los de la organización International Crisis Group, consideran que «el éxito podría deberse a un entendimiento discreto e informal entre las pandillas y el Gobierno».
Esta teoría fue desmentida por el ministro de Seguridad, Rogelio Rivas, quien aseguró en una entrevista con Efe que la reducción de los homicidios y las muertes de pandilleros en tiroteos con los cuerpos de seguridad son prueba de que el Gobierno de El Salvador no mantiene una tregua con las llamadas «maras».
«No hay nada en el ambiente que te permita establecer que hay una tregua o un pacto entre el Gobierno con grupos terroristas (pandillas). Lejos de eso, los estamos combatiendo y muestra de ello son los resultados», sostuvo.
REPUNTE Y TASA DE EPIDEMIA
El Salvador registró en julio pasado un repunte de los homicidios con 112 asesinatos frente a los 69 y 64 muertes violentas computadas en junio y mayo, respectivamente.
Esta cifra de julio llevó la tasa de homicidios a 10,41 por cada 100.000 habitantes, por arriba del índice de 10 considerado como epidemia a nivel internacional.
Este dato surge al cruzar la cifra de homicidios con el total de habitantes, cifrado en 6.704.864 en la última Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples (EHPM) del Ministerio de Economía.
Con los datos acumulados entre enero y julio, la tendencia indica que el país podría cerrar el 2020 con menos de 1.200 asesinatos y una tasa cercana a los 18 homicidios por cada 100.000 habitantes.
Esta tasa sería la más baja de la historia reciente del país centroamericano y concuerda con la previsión del Ejecutivo de Bukele de cerrar el año en curso con un tasa menor a los 20 homicidios por cada 100.000 habitantes.
Al menos entre 2004 y 2019, las tasas más bajas se registraron en los años 2019 y 2013 con 39 y 40 homicidios por cada 100.000 habitantes, respectivamente, según datos oficiales proporcionados a Efe.
Las pandillas, un fenómeno considerado como herencia de la guerra civil (1980-1992) y que se fortaleció con la deportación de pandilleros de Estados Unidos, han resistido a diferentes planes de seguridad de encarcelamiento masivo, confrontación directa y diálogo de los últimos cuatro Gobiernos.
EFE