Río de Janeiro, 4 oct- Los indígenas brasileños, principalmente los que viven en sus territorios protegidos, tienen índices de analfabetismo y de precariedad en sus viviendas muy superiores a los del resto de la población del país, según datos del censo de 2022, divulgados este viernes.
De acuerdo con el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), mientras que la tasa de analfabetismo de la población brasileña en general es del 7 % entre los mayores de 15 años, ese índice llega al 15 % entre los indígenas y alcanza el 20,8 % en las tierras protegidas.
Pese a que se mantienen elevados, los índices mejoraron con respecto al censo de 2010, cuando la tasa de analfabetismo de los brasileños era del 9,6 %, la de los indígenas del 23,4 % y la de los que viven en sus territorios, del 32,3 %.
La población indígena era de unos 1,7 millones de personas en 2022, con lo que constituía el 0,83 % de la población brasileña.
De los censados, 622.844 viven en territorios indígenas y 1,07 millones viven fuera de las áreas delimitadas para los pueblos originarios.
De las 72,4 millones de residencias contabilizadas en el censo, en 630.428 vivía al menos un indígena, es decir, en el 0,87 % del total.
El número no incluye las chozas comunales generalmente hechas de paja y que no cuentan con paredes ni divisiones, que representan el 8,15 % de las viviendas en las tierras indígenas.
Según el IBGE, cerca de 1,1 millones de indígenas, el 69,1 % del total, habitaba en viviendas en situación de precariedad o sin saneamiento básico.
Ese índice de precariedad o de ausencia de servicios llega al 95,6 % entre los que viven en territorios indígenas.
Mientras que el 93,97 % de los brasileños tiene abastecimiento de agua en su vivienda, ese porcentaje cae al 63,21 % entre los indígenas y al 30,76 % entre los que viven en tierras indígenas.
EFE
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