Brasilia, 29 mayo de 2025.– El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, encabezó este jueves un acto de cesión de tierras a pequeños productores y valoró la importancia de la promoción de la agricultura familiar para el combate al hambre en el mundo.
«Cuanta más gente produzca en el campo, cuanto mejor se produzca, más gente podrá comer en este mundo, en el que más de 730 millones de personas no tienen acceso a una alimentación adecuada», declaró el líder progresista en la localidad de Ortigueira, en el sureño estado de Paraná.
En la ceremonia, fueron entregadas unas 10.500 hectáreas a 450 familias de campesinos dedicadas a la pequeña agricultura y que hasta ahora no poseían sus propias tierras.
Los agricultores beneficiados son parte del Movimiento Sin Tierras (MST), una organización de izquierdas que desde hace décadas promueve lo que califica como «democratización del campo» y la producción sustentable de alimentos.
La cesión de esas tierras públicas está enmarcada en los planes de reforma agraria que impulsa el Gobierno, mediante los cuales han sido asentados unos 100.000 campesinos en los últimos dos años.
Según datos oficiales, la agricultura familiar responde por casi el 30 % de la producción total de alimentos de Brasil y parte de su cosecha es adquirida directamente por el Gobierno para los comedores de escuelas, hospitales y presidios, entre otras instituciones públicas.
El combate a la falta de acceso a los alimentos es uno de los puntos fundamentales de la agenda de Lula, que el año pasado promovió, en el marco del G20, la llamada Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, una plataforma de intercambio de experiencias a la que han adherido más de un centenar de países.
EFE