Caracas, 14 may – El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró este viernes que está elaborando una agenda para negociar con la oposición, tras la propuesta de diálogo hecha por Juan Guaidó, y esta incluirá el «rescate de todos los recursos» de la nación.
En un acto de Gobierno, transmitido por el canal del Estado, el gobernante aseguró que le pedirán a la oposición que «rindan cuentas de todos los recursos que le ha entregado el Gobierno de Estados Unidos para conspirar y regresen todas las cuentas bancarias».
Asimismo, pedirán que «regresen Citgo y Monómeros», filiales de la petrolera estatal PDVSA en Estados Unidos y de la petroquímica pública Pequiven en Colombia, respectivamente.
Los Gobiernos de esos dos países no reconocen a Maduro como presidente de Venezuela, sino a Guaidó, razón por la que han reconocido las juntas administrativas designadas por el opositor.
Precisamente, Maduro, que no mencionó a Guaidó directamente, dijo que «el primer punto de todos» los que llevará a la agenda de negociación es que la «oposición extremista renuncie al camino del golpismo, del intervencionismo y de llamar a invasiones contra el país y reconozca la Constitución y poderes legítimos del país».
Antes de mencionar esa agenda, el gobernante ironizó al asegurar que «por ahí anda la ultraderecha» diciendo que «quiere sentarse con Nicolás Maduro».
«La ultraderecha extremista que congeló y se robó el dinero del país, la derecha extremista que organizó invasiones contra Venezuela el 23 de febrero de 2019, que organizó golpes de Estado el 30 de abril de 2019, que organizó una invasión mercenaria para matarnos el 3 de mayo (de 2020) en la operación llamada Gedeón», aseguró.
El 23 de febrero, Guaidó encabezó un intento de introducir ayuda que catalogó como «humanitaria» desde Colombia. El 20 de abril de 2019 lideró un conato de levantamiento junto a una treintena de militares.
La Operación Gedeón fue un intento de incursión en el que participaron dos contratistas militares estadounidenses y en el que murieron, al menos, ocho personas.
«La derecha extremista que pretendió, de manera trágica-cómica, asumir de facto el poder político con apoyo de potencias imperialistas y no pudo, ahora dice que quiere sentarse a hablar, estoy de acuerdo», subrayó.
El jefe de Estado venezolano aseguró que quiere hablar y pidió «que venga la Unión Europea, el Gobierno de Estados Unidos, el Gobierno de Noruega y el Grupo (internacional) de Contacto».
«Que vengan los que quieran venir. Quieren hablar en Venezuela, hablamos, quieren hablar en otro país, hablamos», afirmó antes de añadir que la oposición que lidera Guaidó, «desesperados por su derrota y aislamiento, al final reconocen que tienen que hablar con la fuerza gobernante y mayoritaria que son las fuerzas bolivarianas (…) y el presidente Nicolás Maduro».
Finalmente, le espetó a los opositores que si «quieren elecciones», tal y como proponen sus detractores, acudan a las regionales y locales que se celebrarán el 21 de noviembre.
«Que se inscriban sus candidatos y vamos como hemos ido en años anteriores, pelo a pelo, a disputarnos por voto los cargos que haya que disputarse», concluyó.
EFE