Marcha en Cali: indígenas y activistas piden «compromisos serios» en la COP16

256
Una mujer entona cánticos durante una marcha este martes desde el Parque de las Banderas hasta el centro de Cali (Colombia). EFE/ Ernesto Guzmán

Cali (Colombia), 22 de oct – Con cantos, bailes, muestras artísticas y rituales ancestrales más de 1.000 personas salieron a las calles de Cali para exigir a las entidades mundiales que se reúnen en el marco de la COP16 «compromisos serios» para cuidar la naturaleza y frenar la pérdida de la biodiversidad.

Guardias indígenas, campesinas y cimarronas, además de líderes sociales y activistas, marcharon desde el Parque de las Banderas hasta el centro de Cali, donde está instalada la Zona Verde de la cumbre, escenario cultural y de incidencia política.

Fue una muestra cultural y colorida de los pueblos indígenas colombianos que se sumó al llamado de justicia climática al compás de los tambores y los instrumentos tradicionales del Pacífico

«Es una comparsa por la vida y una manifestación desde la cultura para reclamar que las organizaciones internacionales tengan compromisos reales con el cuidado de la naturaleza y de los que cuidan de ella», expresó a EFE Elena Munenbarg, integrante de la organización 350.ORG.

En esta linea, Enrique Ulcué, líder indígena del pueblo nasa, manifestó que es histórico que durante la COP16 se hable de los «guardianes de los territorios» e insistió en que este protagonismo debe permanecer después de la cumbre mundial.

«Este es un momento importante, no sabemos cuándo vuelva una COP a nuestro país, quizá ya no estemos vivos nosotros, pero los niños de hoy llevarán mañana el legado de la defensa de la madre tierra que es la misma defensa de la humanidad», puntualizó Ulcué.

Llamado al cuidado de las comunidades

Entre pancartas pidiendo el fin de industrias extractivas como combustibles fósiles o minería en la Amazonía, y muestras circenses, las voces de los manifestantes se unieron exigiendo que se refuerce la seguridad para las comunidades campesinas e indígenas que cuidan sus territorios de la deforestación.

«Colombia es un país peligroso para proteger el ambiente, pero es necesario que sigan creciendo liderazgos que protejan a esos verdaderos defensores de la naturaleza y mantenerla contra actividades contra el fracking y la extracción de petróleo», insistió Munenbarg.

‘Playita’, integrante de la Unidad de Resistencias de Cali de la Comuna 18, fue más allá y pidió que los asistentes a la COP16 analicen las compensaciones ambientales.

«La compensación ambiental no puede ser de compañías que paguen para poder seguir explotando las tierras pasando por encima de las comunidades y las mingas. Lo que vivimos hoy es un neo colonialismo disfrazado de economía verde», denunció a EFE el líder caleño.

EFE