En plenaria virtual del Senado de la República, el ministro de Salud y Protección Social, Fernando Ruiz Gómez, defendió las decisiones que se han tomado desde el Gobierno Nacional con el fin de prevenir la propagación de covid-19.
«Todas las medidas que hemos tomado consideramos que han sido las indicadas en cada momento», precisó el ministro, destacando que gracias a esto en Colombia no nos ha tocado vivir lo que se ha visto en países vecinos.
De esta manera, Ruiz Gómez hizo énfasis que mientras países como Italia para el día 40 ya registraban 631 muertes o para el caso de Ecuador era de 242 decesos a causa del covid-19, en Colombia a la fecha son menos los casos lamentables (131). «La tasa de mortalidad en nuestra nación es apenas de 3 por millón de habitantes, mientras que en Brasil es de 8, en Panamá de 22 y en Estados Unidos es de 86 muertes».
Estas cifras permiten reconocer que Colombia ha sabido -a pesar de los retos y dificultades- enfrentar la pandemia del covid-19, destacando aspectos como lo fue tener el primer laboratorio para el diagnóstico del virus en Latinoamérica y también ser los pioneros en adoptar medidas extremas frente al nuevo coronavirus en el continente, con el fin de preservar la salud pública de los colombianos.
Entre las medidas se destaca una serie de decretos, lineamientos y protocolos que han orientado la actual coyuntura y que han permitido una mejor preparación del sistema de salud colombiano, reconociendo que al igual que resto de países del mundo, el covid-19 desborda las capacidades.
En ese sentido, el ministro de Salud destacó el trabajo que ha hecho el sector privado en la extensión de Unidades de Cuidado Intensivo (UCI) en un periodo de mes y medio, mientras que lamentó que varias entidades territoriales tuvieran casi que en abondo sus laboratorios de salud pública. «La verdad, con pocas excepciones, se encontraban en un abandono absoluto, años de no inversión, de no considerar el laboratorio de salud pública importante. El Instituto Nacional de Salud tuvo que asumir las funciones que le correspondían a los entes territoriales», denunció.
En el mismo sentido, el alto funcionario se refirió frente a la responsabilidad de dotación de elementos de protección para personal, insistiendo que es responsabilidad –por ley- de los empleadores (EPS e IPS) y no de la Nación. Sin embargo el Estado ha tomado medidas al respecto y el 8 de abril empezó a entregar insumos a las instituciones «y hasta el momento el sistema de riesgos profesionales ha repartido 750 mil elementos de protección personal en todo el país y ya presentó un plan para que en el próximo mes y medio se puedan entregas 19 millones de elementos de protección».
Otros avances
El Ministerio de Salud y Protección Social tiene como plan 8 mil UCI nuevas como mínimo para la capacidad de respuesta, por lo pronto cuenta con 1.000 médicos y trabaja por tener capacidad de atención al covid-19 en todo el territorio nacional.
En ese sentido, el ministro reconoció que «8 mil UCI puede ser suficiente como también insuficiente. Realmente nadie puede garantizar en este momento que esa capacidad no vaya a ser desbordada, cuando tenemos registros de sistemas de salud en el mundo desbordados».
La situación se entiende un poco mejor al conocer que actualmente en el mercado internacional un ventilador o un respirador cuesta entre 39 mil y 50 mil dólares, cuando apenas hace 4 meses costaba entre 8 mil y 12 mil dólares.
«Los 2.400 ventiladores que hemos adquirido ha sido con un esfuerzo grandísimo de todo el Gobierno Nacional, de todos los embajadores en China, Alemania y Estados Unidos trabajando para tener la mayor cantidad de estos equipos. Yo les aseguro que no existe ningún otro país de Latinoamérica que en este momento tenga por lo menos en contrato, un número de ventiladores tan alto», resaltó Ruiz.
Finalmente, durante la sesión el ministro reveló que ya hay en el país 145 mil pruebas rápidas, las cuales están en proceso de validación por parte del INS y permitirán, tras ser practicadas, visualizar con muestreos cómo se encuentra el país. «Todos estos esfuerzos valen la pena, después del covid-19 nos vamos a enfrentar a un país con nuevas condiciones y con una significativa mirada de lo que debe ser nuestra sociedad», concluyó Ruiz.
Aumento de capacidad hospitalaria
Partiendo de una coordinación de diferentes acciones, el Ministerio de Salud y Protección Social ha diseñado un plan de contingencia para la epidemia de covid-19 que será la hoja de ruta para la toma de decisiones y adaptación del país.
«Con el fin de establecer los parámetros para las necesidades a nivel territorial tomamos un indicador que señala que algo más del 50% de la población colombiana es susceptible. La población que se infecta en la primera ola es menor debido a que nuestra proporción de población joven es menor que países como China, Italia y Francia. Otro factor que se analiza es que tenemos una tasa de tabaquismo (14%) menor que otros países», explica el ministro de Salud y Protección Social, Fernando Ruiz Gómez.
La proyección actualizada en el país es que el 12% de los afectados serán asintomáticos y el 88% sintomáticos. De este último grupo es preciso determinar si se trata de paciente con síntomas leves (tratamiento ambulatorio), severo o crítico (hospitalización) y con ello determinar las camas requeridas en cuidados intermedios e intensivos.
Capacidad
Teniendo en cuenta que Siempre las áreas de atención para estos pacientes deben estar separadas de las demás patologías y la necesidad de más unidades de cuidados intensivos, se establecieron las alternativas para expansión de capacidad instalada.
Lo primero es la expansión de la capacidad en instalaciones de salud en funcionamiento, para en la siguiente fase entrar en expansión de la capacidad instalada en edificaciones de salud que no están en uso. Lo tercero incluye las soluciones provisionales disponibles y la cuarta en edificaciones de uso diferente a salud.
Para las fases de expansión es importante tener en cuenta la capacidad de respuesta según demanda, la planificación y coordinación de las acciones, la prestación de servicios de salud y la gestión del talento humano.
«Por la estructura de nuestro sistema de salud, donde el pago de servicios se hace por evento, la mayoría de prestadores en el país han tenido un incentivo muy grande de llevar a los pacientes a cuidados intensivos. Eso nos llevó a tener más unidades de cuidados intensivos per cápita que muchos países», dice el ministro Ruiz Gómez.
El trabajo en redes es clave para este proceso, «asegurar que tengamos la capacidad de integración. No nos estamos inventando hospitales nuevos, se trata de una ampliación de la red con disposición de logística, historia clínica, sistema y todo lo necesario», finaliza.
Por otro lado, Ruíz Gómez se refirió al aplanamiento actual de la curva comparándolo con el inicio de la epidemia en el país, donde la tasa de crecimiento del contagio era de 2.5 personas contagiadas por cada caso positivo, y con los efectos de la cuarentena, esta cifra se reduce al 1.2, generando una menor demanda de pruebas de COVID-19.
Asimismo, durante una sesión virtual de control político, citada por la Comisión Primera del Senado, el ministro Ruíz aseguró que la cuarentena no terminará el 27 de abril próximo. Seguirá una cuarentena con aislamientos preventivos, con salidas controladas y en caso de que se dispare la epidemia se restringirán de nuevo las salidas y habrá cierres, como sucede hoy.
El país debe generar mecanismos para que no se generen situaciones de hambre o riesgo debido al desempleo y la pobreza. Sin embargo, como la salud es lo primero, tener la transmisión del virus controlada es uno de los requisitos que exige la OMS para levantar gradualmente la cuarentena. Es por eso que la cuarentena sigue después del 27 de abril, explicó MinSalud.