La Defensoría del Pueblo dio a conocer que tras la Operación Odín de las Fuerzas Militares, que dio como resultado la baja de Andrés Felipe Vanegas Londoño, conocido como alias Uriel, en el departamento del Chocó, los familiares de dos menores de edad que se encontraban en la zona le solicitaron por escrito a la entidad activar una misión humanitaria para su rescate. Así las cosas, se confirmó que el defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis, se apersonó del proceso.
De acuerdo con la entidad, una de las informaciones que obtuvo fue que mientras la misión se desplazaba por el río San Juan, la madre de uno de los menores, de 10 años, aseguró a través de una llamada encontrarse en la ciudad de Quibdó esperando a su hija e identificándose como la compañera sentimental de alias Uriel.
La Defensoría del Pueblo precisó que ambos menores de edad ya fueron entregados a sus madres y están libres de todo peligro. “Nuestra prioridad es y será siempre los derechos de los niños”, señaló la entidad.
El comandante de las Fuerzas Militares de Colombia, general Luis Fernando Navarro, fue quien confirmó en días pasados que en el campamento donde se encontraba Vanegas Londoño había dos menores, advirtiendo que estos no formaban parte de su estructura armada. “Los bandidos del ELN eran los que tenían a los menores en el sitio y posteriormente ellos mismos se los llevan”, señaló el general Navarro en una rueda de prensa en Bogotá.
“Durante la fase del planeamiento se tomaron todas las medidas y precauciones en el marco del Derecho Internacional Humanitario para reducir el riesgo de daño incidental y cumplir con la misión encomendada. Por tanto, lo planeamos y lo ejecutamos al detalle, son operaciones de precisión», agregó el general Navarro.
El Operativo Odín
El presidente Iván Duque precisó que el operativo militar que permitió la baja de alias Uriel se logró gracias a un trabajo meticuloso de inteligencias compartidas entre el Ejército Nacional de Colombia, la Policía Nacional, la Armada Nacional y la Fuerza Aérea, además de contar con el apoyo de la Fiscalía General de la Nación.
Iván Duque refirió que alias Uriel fue uno de los criminales que se adjudicó el asesinato de los 22 cadetes que fueron masacrados en un hecho terrorista ocurrido en la Escuela General Santander en 2019. A su vez, indicó que el cabecilla del frente de Guerra Occidental del ELN se responsabilizó en días pasados de la conformación de grupos de terrorismo urbano que atacaron los Centros de Acción Inmediata (CAI) en Bogotá.
“Este bandido se sentía intocable, pero llegamos a su madriguera. Las fuerzas obraron con toda su capacidad y con toda su precisión en una incursión que fue cautelosa y efectiva”, añadió el mandatario.
Tomado de Revista Semana
