El presidente de Brasil le ha propuesta a los gobernadores y dirigentes locales del país tomar como ejemplo a Rio de Janeiro y lanzar una ofensiva contra el crimen organizado, teniendo a las fuerzas policiales y militares bajo una mismo objetivo.
La operación tendrá un financiamiento cercano a los trece mil millones dólares, cuyo dinero llega gracias a unos acuerdos con el Banco Nacional de Desarrollo Económico y social. Con esta suma cuantiosa se espera que los gobernantes estaduales puedan llevar a cabo las exigencias que Temer les plantea para luchar con el crimen organizado, que en los últimos meses ha venido tomando mucha fuerza en el país, informo Ansa Latina.
Temer ha anunciado la creación del Ministerio Extraordinario de Seguridad Publica, ente gubernamental que se encargará de dar las directrices nacionales y supervisar las acciones en esta materia en cada región. Uno de los objetivos principales es la desarticulación de las grandes mafias que tienen como principal negocio el tráfico de drogas local e internacionalmente.
Se espera que todos estos esfuerzos den las respuestas que el clamor nacional necesita. Las operaciones de grupos criminales han convertido algunas regiones de Brasil en campos de batalla por el poder. Los casos más recientes de éxito contra estas organizaciones se han dado en Rio de Janeiro, donde la intervención del ejército federal ha surtido efectos positivos.