Los Ángeles/Washington, 28 septiembre.- Al menos 22 incendios, alimentados por fuertes vientos, siguen forzando este lunes en California la evacuación de decenas de miles de residentes en los condados de Napa, Sonoma y Butte, una conocida región vinícola, y han provocado la muerte de otras tres personas en las últimas horas, informaron las autoridades.
En el condado de Shasta, a unos 300 kilómetros al norte de Sacramento, la capital del estado, tres personas murieron en otro incendio forestal de rápido movimiento que empezó a quemar el domingo por la tarde cerca de Redding, la urbe más grande de la demarcación, anunció este lunes el alguacil, Eric Magrini.
Hasta ahora, las autoridades no han identificado todavía los cadáveres de estas nuevas tres víctimas mortales.
Con el fallecimiento de estas tres personas, el número total de muertos por los incendios en ese estado ascendió este lunes hasta los 25, según el recuento del Departamento Forestal y de Protección contra Incendios de California (Cal Fire), aunque otras fuentes no oficiales sitúan la cifra por encima de la treintena.
Los vientos cálidos alcanzaron velocidades de más de 80 kilómetros por hora en el norte de California donde las temperaturas marcaron récords de 39 grados Celsius en Napa y 35 grados en Oakland.
Las autoridades esperan condiciones propicias para que se produzcan grandes incendios desde el sur de Oregón hasta el área de la Bahía de San Francisco y el condado de Los Ángeles.
El servicio meteorológico ha dado alertas de calor excesivo y malas condiciones en la calidad del aire en todo el oeste del país, pero principalmente en California.
Al menos 2.200 viviendas estaban amenazadas por varios incendios en el área que los bomberos han denominado Glass, que ha quemado al menos 1.135 hectáreas después que comenzó en pastizales cerca del parque Deer.
Entre las estructuras alcanzadas por las llamas durante la noche está la bodega Chateau Boswell y la Posada Glass Mountain, y los bomberos indicaron que esperan que los vientos se mantengan fuertes hasta el anochecer del lunes.
«Ha habido numerosas evacuaciones durante toda la noche», dijo a la prensa Tayree Zander, portavoz del Cuerpo de Bomberos de California. «Estos incendios se propagan a un ritmo muy rápido, peligrosos», agregó.
Antes del amanecer la Jefatura de Policía del condado Sonoma emitió una orden de evacuación de los vecindarios a lo largo de la Autopista 12 y al sudoeste del límite de los condados Napa y Sonoma, instando a los residentes a que huyan hacia Sonoma debido a «la amenaza significativa para la vida y las propiedades».
Y, dos horas más tarde, la Jefatura de Policía de Sonoma emitió otra orden de evacuación debido «a múltiples incendios en las rutas Los Álamos y Santa Helena».
A esa misma hora la Oficina de Servicios de Emergencia del Condado Napa emitió una orden de evacuación para el área al norte del Parque Estatal Bothe hasta la Ruta Diamond Mountain, y alertó que está cerrado el paso en la Autopista 29 entre la Avenida Lincoln y la ruta Deer Park.
Numerosas casas empezaron a arder temprano el lunes en los vecindarios suburbanos al este de Santa Rosa, que con 177.000 habitantes es la ciudad más populosa del Condado Sonoma.
Alimentadas por los fuertes y cálidos vientos Diablo, que soplan desde el norte y el este, las llamas afectaron al área de Mountain Hawk Drive que amenazan las viviendas del complejo residencial Skyhawk, construido a finales de la década de 1990 y comienzos de 2000.
Al anochecer del domingo, decenas de bomberos libraron una batalla para impedir que las llamas cruzaran el Camino Silverado, una importante vía de tránsito, mientras las llamas amenazaban el Hospital Adventista St. Helena, que fue desalojado horas antes.
Pero los bomberos indicaron que poco antes de las 22:00 hora local (05:00 GMT del lunes), las llamas habían saltado al otro lado del Camino Silverado y el río Napa.
EFE