- El lugar tiene capacidad para 50 participantes. De momento, 36 niños y niñas asisten en alternancia.
- Los beneficiarios reciben acompañamiento pedagógico, nutricional y recreativo, entre las 8:00 a. m. y las 4:00 p. m.
- Actualmente, 74.420 estudiantes están inscritos en Buen Comienzo, programa que presta servicio en 373 sedes.
Medellín, junio 6 de 2021- Unos 36 niños y niñas, hijos de trabajadoras sexuales, venteros ambulantes y otros usuarios del centro de Medellín, reciben atención nutricional, pedagógica y recreativa en el Centro Infantil Casa del Encuentro, de la Unidad Administrativa Especial Buen Comienzo.
La sede de 240 metros funciona dentro del Museo de Antioquia y tiene capacidad para atender a 50 menores, entre los 2 y los 5 años. Por condiciones de la pandemia, 36 participantes asisten bajo el modelo de alternancia.
“Hoy queremos resaltar el trabajo que se hace desde Casa del Encuentro, un centro infantil ubicado en pleno centro de Medellín, exactamente en el Museo de Antioquia. Un centro infantil que atiende a niños y niñas de población vulnerable, son hijos de trabajadores sexuales de esa zona, queremos resaltar el trabajo de todos nuestros agentes educativos y especialmente lo que estamos haciendo en pro de la garantía de los derechos de estos niños y estas niñas más vulnerables”, dijo el subdirector de Nutrición de la Unidad Administrativa Especial Buen Comienzo, Hugo Díaz.
Los beneficiarios llegan al centro infantil a las 8:00 a. m. y permanecen en las instalaciones hasta las 4:00 p. m., cuando los recogen sus acudientes, que en la mayoría de los casos se dedican al trabajo informal en las calles del Centro.
Una de estas personas es Daniela Echeverry Castro, mamá de Valery (3 años), quien se dedica a vender medias, accesorios y otros artículos debajo de la estación Cisneros del Metro de Medellín. Gracias a la alternancia, la niña pasó de estar toda la jornada entre venteros ambulantes a recibir formación pedagógica, alimentación y otros servicios como recreación en Casa del Encuentro.
“El centro infantil de Buen Comienzo me ha brindado apoyo en el sentido en que yo trabajo la calle y la niña está segura para yo poder trabajar tranquila. Las profesoras me transmiten mucha seguridad y sé que ella está bien. Si la niña no estuviera allá, estaría conmigo trabajando, porque no tengo vecinos, ni familia de confianza. Por eso, el centro infantil es un apoyo y un alivio”, contó Daniela.
Además de los servicios tradicionales de Buen comienzo, en Casa del Encuentro los participantes aprenden de cultura gracias a la interacción con los artistas del Museo de Antioquia. El jardín conecta a través de un túnel con el museo y, en jornadas programadas, los pequeños hacen recorridos para conocer las obras e interactuar con los expositores.
“Este es el único centro infantil del mundo en un museo y está acá en Medellín. Los niños y las niñas encuentran acá este trabajo magnífico en donde tienen la posibilidad de crecer, de fortalecer competencias a través del arte, porque acá ellos pasan al museo y tienen contacto con los artistas. Aquí ellos tienen la oportunidad de alimentarse bien, desarrollar sus habilidades y tienen además el cuidado y protección a través de la oferta de la Alcaldía”, afirmó el director de Primera Infancia Corporación Viviendo Juntos, Juan Monsalve.
Actualmente, Buen Comienzo opera en sus cuatro modalidades, tiene 74.420 inscritos y 373 sedes en funcionamiento.