El presidente Iván Duque dijo esta semana que “no existe ninguna reforma laboral presentada por nuestro gobierno”, como una aclaración frente a uno de los argumentos que se ha usado para apoyar el paro del 21 de noviembre que es, justamente, la crítica a una reforma laboral supuestamente propuesta por el Ejecutivo.
Pero en respuesta a esta afirmación del mandatario, algunos usuarios de Twitter han puesto a circular imágenes de un proyecto de ley del expresidente y senador Álvaro Uribe, acompañadas por mensajes que lo presentan como si se tratara de una de iniciativa gubernamental. Esto llevó a que varios usuarios le preguntaran a Colombiacheck sobre la veracidad de esas versiones.
Por ejemplo, un trino asegura que “en la Gaceta del Congreso sale esta belleza” y muestra un facsímil de la publicación, luego de cuestionar a Duque por negar la existencia de la “reforma laboral”.
El gobno Duque muerto del miedo por PARO NACIONAL dice que lo de la #ReformaLaboral es falso, que es mentira de los «desestabilizadores». Pero en la Gaceta del Congreso sale esta belleza👇 #21NoviembreParoNacional
EL URIBISMO SIEMPRE MIENTE#YoParoEl21N #PaquetazoDeDuque#SDVSF pic.twitter.com/SPLE9pRx5Z— Efrapotter (@efrapotter) November 10, 2019
Aunque la iniciativa que se ve en la Gaceta es real y fue firmada por toda la bancada del Centro Democrático, que es el partido de Uribe y del presidente, el mensaje es ‘verdadero pero’ porque no es una reforma general del Código Sustantivo del Trabajo y tampoco es de autoría del Gobierno ni el Ejecutivo le ha manifestado su apoyo (o rechazo).
El contenido
El Proyecto de ley 212 de 2019 del Senado sí fue publicado en la Gaceta del Congreso 973 del pasado 2 de octubre. Sin embargo, la jefe de prensa de Uribe, Stephanie Carrillo, aclaró que no es una reforma laboral porque “no aborda temas como relación o contratos de trabajo, remuneración o prestaciones sociales”.
Al revisar el texto, se puede comprobar que modifica directamente un solo artículo del Código Sustantivo del Trabajo, el 161. Este cambio consiste en reducir la jornada laboral de 48 a 45 horas semanales. También disminuye de diez a nueve el máximo diario y elimina el mínimo, que actualmente es de cuatro horas continuas.
La propia exposición de motivos del proyecto reconoce que este cambio no es profundo porque esta nueva jornada “es la que ya se tiene implementada en la práctica”. Para demostrarlo cita la versión más reciente (2016-2017) de la Encuesta Nacional de Uso del Tiempo del DANE que, en efecto, determinó que el promedio actual es de 45,1 horas laborales a la semana a pesar de que la ley permite 48 como máximo.
Las siguientes disposiciones establecen claridades sobre esos puntos. Una es que estas nuevas normas podrían ser implementadas de forma gradual por los empleadores hasta llegar a la meta, a más tardar, en tres años. Otra es que esto no puede afectar los salarios ni otros derechos adquiridos por los trabajadores.
Enseguida, dice que lo anterior exonera a los empleadores de cumplir con el Artículo 163-A del Código, creado por la reforma de 1990, que establece que dos de las 48 horas semanales de trabajo máximas actuales deben ser para actividades recreativas en las empresas con más de 50 empleados. Lo mismo hace con el 5-A de la Ley de Protección a la Familia, adicionado a esta en 2017 para flexibilizar los horarios de quienes trabajan y además cuidan de sus parejas u otros parientes.
El Artículo 6 de la propuesta es el que plantea la contratación y el pago por horas para personas de 18 a 28 años que estudien y trabajen, así como para quienes sigan laborando después de la edad de jubilación, que actualmente es de 57 años para las mujeres y 62 para los hombres. El siguiente, le da seis meses de plazo al Ministerio de Trabajo para reglamentar el funcionamiento del sistema de salud para quienes coticen con esa nueva modalidad. Y el último, como en cualquier proyecto, establece la vigencia.
Para el abogado laboralista Camilo Cuervo Díaz, profesor de la Universidad Javeriana, “lo único medianamente novedoso [del Artículo 6] es que permite pagar seguridad social por menos del mínimo nominal, lo cual ya se puede hacer hoy en algunos sistemas que permiten cotizar por días”.
Aunque la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) sí considera, a partir de su Estudio Económico de Colombia 2019 publicado en el 24 de octubre, que hoy existe una “penalización del empleo a tiempo parcial” y sugiere establecer un salario mínimo por horas para evitarla, el docente explica que no hay ninguna norma que prohíba expresamente esa modalidad de contratación. Así que la iniciativa está lejos de ser una gran reforma laboral. Por el contrario, Cuervo la considera un “globo”.
Y mientras el Legislativo lo eleva, el Ejecutivo no ha dicho si está a favor o en contra.
La posición del Gobierno
El senador uribista Honorio Henríquez ya elaboró una ponencia para que el proyecto sea aprobado en primer debate en la comisión séptima, pero este fue aplazado el pasado miércoles, entre otras razones, porque los ministerios de Trabajo y Hacienda no se han pronunciado sobre su contenido. Esto lo confirmaron Carrillo y el autor de la proposición de aplazamiento, Carlos Fernando Motoa, de Cambio Radical.
Colombiacheck buscó un pronunciamiento del MinTrabajo a través de su oficina de comunicaciones sin obtener respuesta hasta el momento de publicar esta nota.
No obstante, Duque y la ministra Alicia Arango han insistido en que no presentarán una reforma en esta materia sin pasar por la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Salariales y Laborales, en la que participan gremios y sindicatos. Lo manifestaron precisamente ante ese organismo el martes pasado y en octubre, así como la semana pasada en el taller ‘Construyendo País’ de Barichara, Santander, y el Congreso Nacional Agropecuario.
El presidente de la Confederación de Trabajadores de Colombia (CGT), Luis Miguel Morantes, le dijo a Colombiacheck que en esa mesa “no hay todavía ninguna propuesta concreta de reforma por parte del Gobierno”. Además, aclaró que el proyecto de Uribe tampoco se ha discutido en esa instancia “porque no ha llegado oficialmente a la agenda, aunque se sabe que existe”.
El único pronunciamiento de Arango sobre el pago por horas ha sido en respuesta a una propuesta que la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) hizo en septiembre, de abrir esa posibilidad para actividades específicas como el diseño gráfico, la programación informática o la gastronomía; pero esta no hacía alusión a la edad, que es el factor diferencial en el proyecto del Centro Democrático. En todo caso, la jefa de cartera dijo entonces que “nosotros, como gobierno, no estamos totalmente de acuerdo”.
De modo que sí existe el proyecto del uribismo en trámite, pero no tiene los alcances de una reforma ni ha sido promovido por el Ejecutivo, que tampoco ha planteado una posición clara sobre ideas similares.
Por José Felipe Sarmiento
Tomado de Colombia Check