Nueva Delhi, 15 sep – El jefe de Gobierno de Nueva Delhi, Arvind Kejriwal, en libertad bajo fianza desde el pasado viernes y acusado de ser parte de una trama corrupta relacionada con las licencias de venta de licor en la capital india, anunció este domingo que dimitirá de su cargo en los próximos dos días y pidió que se adelanten las elecciones locales en la ciudad.
En un acto junto a la militancia de su partido anticorrupción, el Partido Aam Aadmi (AAP, por sus siglas en inglés), Kejriwal comunicó su decisión, tan sólo dos días después de su liberación por parte del Tribunal Supremo indio, tras cinco meses de prisión en los que continuó ejerciendo su cargo de jefe del Gobierno delhí desde la cárcel
«Renunciaré como ‘ministro principal’ (el cargo equiparable a jefe de Gobierno capitalino). No me sentaré en esa silla hasta que la gente anuncie su veredicto», aseguró el líder político, uno de los principales opositores al Gobierno del primer ministro Narendra Modi y a su partido, el nacionalista hindú Bharatiya Janata Party (BJP).
«Las elecciones en Delhi están a meses distancia (…) Obtuve justicia del tribunal legal, ahora obtendré justicia del tribunal popular. Sólo me sentaré en la silla de ministro principal después de la orden del pueblo», insistió Kejriwal ante sus fieles en un acto que fue retransmitido en directo por el canal de televisión delhí NDTV.
El político, que ocupa el cargo de jefe del Ejecutivo capitalino de manera ininterrumpida desde 2015 -fue jefe de Gobierno durante un período más breve entre 2013 y 2014-, tiene previsto abandonar la Jefatura de Gobierno en los próximos dos días, detalló.
Hasta la celebración de nuevos comicios, otro miembro del AAP le sucederá al frente de Nueva Delhi.
Inicialmente, las elecciones en la capital india están programadas para el mes de febrero del próximo año, pero Kejriwal propone que se adelante su convocatoria para que éstas coincidan con los comicios del estado de occidental de Maharahstra, que se celebrarán en noviembre de 2024.
El jefe del Gobierno capitalino fue arrestado en marzo, acusado de haber aceptado sobornos por valor de 1.000 millones de rupias (12 millones de dólares) de contratistas de bebidas alcohólicas para permitir su entrada en el circuito de venta de alcohol de la capital india, que cuenta con importantes restricciones.
Kejriwal fue detenido por la fuerza de investigación estatal del país asiático, el Buró Central de Investigación (CBI, por sus siglas en inglés), sin condena y puesto bajo custodia del Directorio de Ejecución del Gobierno nacional, la agencia anticorrupción estatal.
Antes de su puesta en libertad bajo fianza por parte del Tribunal Supremo indio, una corte subalterna le había otorgado una medida de fianza, que fue bloqueada por las agencias del Gobierno.
La detención del destacado líder fue ampliamente criticada por la oposición, que acusa a Modi de emplear las agencias gubernamentales contra sus críticos, y suscitó también mensajes de inquietud en países como Alemania o Estados Unidos.
EFE