La violencia escenificada en el Alto Sinú y la disputa del control de la zona entre actores armados obligó a 108 familias indígenas de la población de Coredó, municipio de Tierralta, a dejar su territorio y desplazarse hacia los cascos urbanos.
Este es el primer desplazamiento que se registra en el Alto Sinú en 2020 y que eleva la cifra a más de 300 familias desplazadas en este municipio en los últimos meses, así lo informó el secretario de Gobierno de Tierralta, Loyar Pineda Delgado durante un encuentro en Montería entre autoridades municipales, departamentales y del Estado.
“Al día de hoy tenemos una misión médica de aproximadamente 15 funcionarios que están en esta zona prestando un servicio médico de urgencia, hay niños desnutridos y mujeres embarazadas en esta comunidad”, dijo el funcionario.
Detalló que esta población desplazada ha recibido ayuda humanitaria en dos ocasiones a través del Programa Mundial de Alimentos.
“Las familias primero llegaron de manera masiva y ahora siguen llegando otras a cuentagotas”, dijo. Esperan reunirse en las próximas semanas con las autoridades indígenas para evaluar las medidas de seguridad que permitan su retorno.
“Las familias primero llegaron de manera masiva y ahora siguen llegando otras a cuentagotas”, dijo. Esperan reunirse en las próximas semanas con las autoridades indígenas para evaluar las medidas de seguridad que permitan su retorno.
Tomado de GSNoticias
