Damasco, 16 marzo del 2025 – Responsables sirios visitaron este domingo la base aérea rusa de Jmeimin, en la provincia siria de Latakia, para tranquilizar a las más de 8.000 personas que huyeron de la violencia que estalló hace más de una semana, sobre todo contra la minoría alauita, informaron medios oficiales.
Tanto oficiales de la región de Jableh, en Latakia, como responsables de seguridad «visitaron la base aérea de Jmeimin para reunirse con ciudadanos sirios que se encontraban allí. El objetivo era tranquilizarlos y confirmarles que se había restablecido la seguridad en sus pueblos, al igual que en el caso de los que habían regresado a sus hogares», informó la agencia oficial de noticias siria, SANA.
Esta visita incluyó una «explicación de las medidas que está tomando el gobierno para mantener la seguridad en la región y garantizar que se cubren las necesidades básicas para asegurar el regreso de los ciudadanos a sus hogares», dijo la agencia, sin dar más detalles.
SANA no indicó cuántas personas se encuentran refugiadas en esa base, aunque la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajarova, indicó el pasado jueves que los militares rusos acogieron a más de 8.000 personas, principalmente mujeres y niños.
La semana pasada, una ola de violencia en las provincias costeras de Latakia y Tartús por miembros afiliados a la nueva administración siria mataron a más de 1.300 alauitas, rama del chiísmo que profesa la familia Al Asad, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que afirmó que fueron «asesinatos a sangre fría».
Aunque esta cifra aún está siendo confirmada por otros organismos y la ONU, que hasta el momento ha identificado 111 civiles muertos.
EFE