Según dijo el general Juan Alberto Libreros Morales, director de Tránsito y Transporte de la Policía Nacional ante los diferentes medios de comunicación “los hechos son materia de investigación. El joven murió en medio de su traslado al Hospital Regional de la Orinoquía y en la operación se incautaron 1,5 kilos de marihuana y un arma traumática.”
Por: Yurany Alzate (@yuranyAlzate1)
Colombia, 16 septiembre de 2021.-
Un policía de Tránsito habría asesinado el pasado 11 de septiembre, al joven Johan Sebastián Ortega de 20 años. Según la versión entregada por Jenny Carolina Prieto, quien iba en compañía de la víctima, él habría muerto por un tiro propinado en el cuello.
Según las versiones de la familia de Johan, él y su pareja se desplazaban en una moto, y al percatarse de que en el kilómetro 25 había un operativo de tránsito de la Policía, se detuvieron porque no tenían la licencia de conducción.
(En contexto: ¿Quién nos cuida de los que nos deben cuidar?)
En ese momento, cuenta Jheny Carolina, la Policía levantó el puesto de control y se acercó a la moto, que se encontraba a un lado de la carretera esperando que pasara el operativo para poder seguir su camino, y les pidieron papeles.
Por ello Johan y su pareja arrancaron a toda velocidad, así que una camioneta con dos policías comenzó una persecución. Los alcanzaron y según ella lo denunció, les propinaron tres disparos que terminaron con la vida del joven.
Según dijo el general Juan Alberto Libreros Morales, director de Tránsito y Transporte de la Policía Nacional ante los diferentes medios de comunicación “los hechos son materia de investigación. El joven murió en medio de su traslado al Hospital Regional de la Orinoquía y en la operación se incautaron 1,5 kilos de marihuana y un arma traumática.”
Ante esas declaraciones, Jenny Carolina Prieto, comentó que es “mentira que ellos llevaran algo o que portaran armas al momento de los hechos.”
Según lo que se evidencia en el vídeo que se difundió en redes sociales a Johan no le prestaron primeros auxilios, lo dejaron desangrar. ¿Cuál es la educación en derechos humanos que recibe la Policía Nacional? Es evidente que el problema no era el uniforme, sino que se necesita una reforma policial como lo establece la concejal de Bogotá Ana Teresa Bernal
No es la primera vez que se presentan casos como este en Colombia. El abuso policial viene en aumento, así lo demostraron las organizaciones defensoras de derechos humanos como la ONG Temblores o el Proceso Social de Garantías durante el estallido social que vivió el país hace un par de meses. En sí, fueron 4.852 casos de violencia policial y 11 presuntos asesinatos por parte de la Fuerza Pública.
Jenny Carolina Prieto le dijo al Diario del Llano, que tanto ella, como su madre y su suegra, están siendo amenazadas.
El concejal de Bogotá Diego Cancino, rechazó que se utilice los antecedentes judiciales de Johan, para montar una escena y así los policías implicados queden en libertad.
El presunto asesinato de Johan por parte de un agente de la Policía Nacional, es una investigación más para la gran lista de investigaciones por abuso policial, que tiene esta institución estatal.
Azul o verde, cambia el color, pero no los procedimientos que realiza la Policía Nacional dejan claro que se necesita una reforma.
Recordemos que no es la primera vez que se presentan ese tipo de denuncias, un ejemplo de ello, es que Human Rights Watch, en un reporte que entregó el 9 de junio del 2021, señaló que miembros de la Policía Nacional de Colombia cometieron abusos gravísimos en contra de manifestantes en su mayoría pacíficos durante las protestas, por esa razón, también pidió al gobierno de Colombia tomar medidas urgentes para proteger los derechos humanos e iniciar una reforma policial profunda para garantizar la vida de la comunidad y que los responsables de abusos sean llevados ante la justicia.
