El Carmen de Bolívar (Colombia), 2 may – El presidente de Colombia, Gustavo Petro, celebró este jueves que la región de Montes de María, en el norte del país, fue declarada libre de sospecha de minas antipersonas, y confió en que en los próximos años la cifra de esta clase de explosivo llegue a cero en todo el territorio, lo que sería «una gran noticia para la historia colombiana».
«Para el año 2006 hubo 1.224 víctimas de minas, y para este último año fue de 37 (…), esto deja unas secuelas que tenemos que afrontar, esperemos que para los años venideros en el país siga cayendo y cayendo (la cifra) hasta que se vuelva cero», dijo el mandatario en Carmen de Bolívar.
Petro hizo un recorrido por el lugar donde se encuentran las artesanías hechas por las mujeres de este municipio, que se exhiben en una exposición, y las escuchó en sus demandas, para posteriormente resaltar que la tarea del desminado es «de las más complejas, y peligrosas, del posconflicto».
El mandatario indicó que «de acuerdo a los datos que tenemos dibujados desde 1990 (…) comienza a crecer en el año 1998 y su punto máximo en número de víctimas se alcanza en 2006, y de ahí comienza a bajar», pero expresó que ese año «fue terrible».
Lamentablemente, prosiguió el jefe de Estado, el uso de minas antipersonas «no se ha podido erradicar completamente en Colombia».
En este sentido, Petro pidió al ministro de Defensa, Iván Velásquez, también presente en el acto, que se apruebe un «estatus laboral especial del desminador».
«La persona que se dedica durante todo su tiempo laboral a encontrar y desactivar las minas y que está arriesgando permanentemente su vida (…) tiene una profesión de alto riesgo», por lo que necesita tener «estímulos», señaló.
Por otro lado, Petro se refirió a los civiles afectados por estas minas, que no solo tienen que contar con el apoyo gubernamental en el tema de salud, por ejemplo con las prótesis para quienes han sufrido amputaciones en sus extremidades, sino también en lo económico y social.
La ceremonia, que se llevó a cabo este jueves, es la culminación de 15 años de trabajo articulado e ininterrumpido de las entidades del Estado para alejar el peligro que suponen las minas antipersonas y propiciar mayor desarrollo de la región.
El desminado humanitario hace parte del cumplimiento de los compromisos adquiridos por Colombia con la firma del Tratado de Ottawa sobre la prohibición de empleo, almacenamiento, producción y transferencia de minas antipersonas.
En desarrollo de sus labores, los artificieros de la Armada neutralizaron 251 amenazas ocasionadas por el hallazgo de estas minas, municiones sin explosionar y artefactos explosivos improvisados.
Con ello beneficiaron a más de 2,5 millones de habitantes de la región.
EFE