El dólar en Colombia comenzó una nueva semana de noviembre al alza, pues cerró en promedio en $3.447,79 y registró una subida de $26,5 en la jornada del lunes frente a la Tasa Representativa del Mercado, la cual se ubicó en $3.421,26.
Este impulso se dio principalmente por los temores que genera, entre los inversionistas, la marcha nacional que fue convocada por diversos sectores de la economía, gremios y partidos políticos para el 21 de noviembre, denominado como el 21N.
Esta incertidumbre que ha permeado tanto en el mercado de capitales como en el comercio y la economía en general, ha desencadenado un factor de miedo que ha derivado en el refugio en la divisa, por la posibilidad de sobrepasas los $3.500, lo cual sería un récord, ya que su pico máximo fue cuando se ubicó en $3.497,34 el pasado 3 de octubre.
Ante la especulación y la incertidumbre, la jornada de ayer reflejó el efecto negativo entre algunos operadores, pues la negociación de la divisa se ubicó en un rango en el que el máximo fue de $3.460,01, mientras que el mínimo fue de $3.428, dato similar al valor con el que empezó la sesión.
El hecho de haber rozado los $3.450 al cierre indica que el mercado estuvo quieto, a pesar de que los analistas aseguraron que la cantidad de negociaciones fue baja (1.615), en relación a días pasados en las que se registraba más de 2.000 operaciones diarias. El monto total, equivalente al número de negociaciones para la jornada de ayer fue de US$1.019 millones.
Además, de acuerdo con la última Encuesta de Opinión Financiera de Fedesarrollo, las condiciones sociopolíticas pasaron a ser el tercer factor más relevante a la hora de invertir, para 18% de los encuestados, superado solo por la coyuntura global (44,7%) y la política fiscal (36,8%).
Juan David Ballén, director de análisis de Casa de Bolsa, dijo que “el tema de la marcha influye en la especulación, dependiendo de qué tan intensa sea. El dólar podría seguir subiendo, y como el paro es cerrando semana, esto puede generar que la economía esté paralizada”.
Los investigadores afirmaron que esa especulación ante las próximas manifestaciones es uno de los principales factores que mueven la divisa al alza, y añaden que esto genera temor porque puede ser un efecto contagio debido a las coyunturas sociales que han ocurrido en las últimas semanas en Chile, Bolivia, Ecuador y Venezuela, y que han presionado a la baja el valor de sus monedas, con respecto al dólar.
En lo que va corrido del año, Argentina y Chile lideran el ranking de las monedas más devaluadas de la región.
En el caso argentino, convulsionado por las decisiones políticas, la caída del peso es de más de 36%, mientras que la situación en Chile es la que ha generado más pánico entre los inversionistas, pues su devaluación, que llevó al dólar a un máximo de 800 pesos y ha derivado en una caída de su divisa de 9,74%, ha estado impulsada por las presiones de los manifestantes en sectores como el comercio, la industria, la infraestructura entre otros, que han dado vida al incremento del riesgo en el mercado.
Las razones de la marcha en Chile son alimentadas por diferencias sociales y descontentos frente a sistemas como el pensional, y en ese punto, las motivaciones de los manifestantes en Colombia son similares, por lo que los analistas hablan de un posible efecto contagio, lo cual ha presionado el dólar al alza.
Esta situación regional, según Diego Camacho, director de investigaciones macroeconómicas de Ultraserfinco, podrían generar presiones sobre la tasa de cambio, por lo que el valor de la divisa dependerá de cómo se desarrollen las protestas el 21N.
Con base en esto, y ante el creciente protagonismo que han tomado las condiciones sociopolíticas de cara a los inversionistas, es probable que la senda alcista de la moneda continúe y rompa la barrera de los $3.500, en la cual la TRM nunca se ha establecido y así borre la proyección que los analistas entregaron a Fedesarrollo, de que la divisa estaría en $3.350.
Andrés Moreno, analista financiero, dijo que el principal factor que asusta son las posibles afectaciones que generaría el paro, ya que esperaban un precio de la divisa diferente, pues algunos temas macroeconómicos como la baja en las tasas de interés de EE.UU. deberían fortalecer la tasa de cambio.
A pesar de que la divisa por estos días se ha visto presionada principalmente por la incertidumbre local y regional, factores como el precio de petróleo, la falta de acuerdo comercial entre Estados Unidos y estacionalidad, en la que hay menos liquidez, también presionan al peso frente al dólar.
Tomado de El Colombiano