Lisboa, 26 noviembre.- Portugal volvió a superar hoy los 6.000 casos diarios, lo que no ocurría desde el pasado sábado, y registró 82 muertes en las últimas 24 horas, mientras los hospitalizados en UCI se mantienen en niveles máximos de toda la pandemia.
Según el boletín de la Dirección General de Salud (DGS), desde ayer miércoles se notificaron 6.383 casos, el número más alto desde el sábado y que se aproxima al récord registrado el pasado jueves, cuando rozó los 7.000 contagios.
En las últimas 24 horas se reportaron además 82 muertes, la tercera mayor cifra de la pandemia, que elevó el número total de fallecimientos a 4.209.
Desde marzo, el país acumula 280.394 casos de covid-19, de los que más de 82.000 permanecen activos.
En los hospitales, donde la presión ha crecido significativamente en las últimas semanas, se produjo por segundo día consecutivo un descenso en los internados totales, aunque la cifra permanece en niveles elevados: 3.192 personas.
Los ingresados en UCI, que ayer miércoles tocaron un máximo de toda la pandemia, se mantuvieron estables (516 pacientes, uno menos que ayer).
La región Norte sigue siendo la más afectada por la pandemia y concentró el 54 % de los contagios de las últimas 24 horas, seguida de Lisboa y Valle del Tajo (28 %) y el Centro (15 %).
Los expertos calculan que el pico de la segunda ola en Portugal será alcanzado esta semana, con unos 7.000 contagios diarios.
La segunda ola está siendo más severa en el país, tanto en número de casos como de fallecidos, y este jueves se ha confirmado que un miembro del Gobierno, el ministro de Planificación, Nelson de Souza, de 65 años, está infectado y presenta «síntomas leves».
Mientras se intenta controlar la pandemia, Portugal está preparando su plan de vacunación, que será concluido «en los próximos días», según avanzó el miércoles la ministra de Sanidad, Marta Temido.
El país, con unos 10 millones de habitantes, se encuentra en estado de emergencia, el nivel de alerta más alto, hasta el 8 de diciembre, aunque el presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa, ya avisó de que podría ser necesario prorrogarlo más allá de esa fecha y que incluso podría alcanzar la Navidad.
Aunque se desconoce qué restricciones habrá en las fiestas, la ministra de Sanidad ya avisó de que los portugueses no podrán tener una Navidad «igual a la de otros años» por mucho que la situación epidemiológica mejore.
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