Redacción Análisis Urbano
Wilson Antonio López Tamayo, miembro de las FARC, indultado el 20 de enero de 2016 por el Gobierno Nacional, en cabeza del presidente Juan Manuel Santos, en medio del gesto unilateral de Paz anunciado el 22 de diciembre de 2015, se encuentra en grave estado de salud y, además, fue amenazado de muerte por la Oficina del Valle del Aburrá y obligado a salir desplazado del municipio de Envigado, Antioquia.
Los hechos se presentaron el 1 de febrero, Wilson Antonio López se encontraba en su hogar cuando varios individuos quienes se identificaron como miembros de la Oficina, se acercaron a decirle que a través de noticias que aparecieron en los medios de comunicación se habían dado cuenta de quien era él, a qué se dedicaba y de dónde venía, que se lo decían “para que mire a ver qué va a hacer”.
Posteriormente el 3 de febrero, Wilson Antonio López Tamayo recibió una llamada amenazante donde le anunciaron: “Casi que no nos damos cuenta de quién es usted, lo vimos en televisión, se lo tenía muy bien guardado. Sabemos dónde vive y dónde está usted».
Wilson Antonio López Tamayo se constituye en el primer indultado del proceso de paz que se realiza en la Habana Cuba, que es amenazado de muerte por una de las estructuras paramafiosas que operan en el Valle del Aburrá.
Análisis Urbano y la ONG Corpades, se pregunta:
¿Qué acciones concretas viene tomando el gobierno nacional para preservar la vida de quienes han decidido transitar el camino de la paz y la reconciliación?
¿Qué planes concretos tiene el gobierno nacional para desmantelar las estructuras paramafiosas que operan en Antioquia, las cuales tienen una fuerte presencia en el Valle del Aburrá?
¿Señor presidente Juan Manuel Santos, será que la paz necesita más que palabras y gestos de buena voluntad?
[scribd id=298266108 key=key-sr1k05yo3l2GgmFwLjzG mode=scroll]
Temas relacionados
La Oficina no ha desaparecido y la guerra en Medellín no parará